El último tramo de la calle Dato se despide de uno de sus locales más reconocidos. El restaurante La Regadera ha bajado la persiana y pone fin a una andadura de más de 25 años en los que ha compaginado también, antes de 2016, otra denominación muy popular entre los gasteiztarras como fue La Huerta.

Fin a 23 años en el restaurante

Con el cambio de hoja en el calendario, su hasta ahora responsable Mikel Fiestras, ha decidido no continuar con esta aventura que inició en el local en el año 1999.Por delante se le presentan nuevos proyectos y espera tomarse algún tiempo para reflexionar y valorar hacia dónde enfila su nueva andadura profesional.

Mikel Fiestras comenzó en 1999 a trabajar en el entonces restaurante La Huerta Alex Larretxi

El integrante de la saga Fiestras dedicado a la restauración y gastronomía pone fin a una etapa iniciada en el año 1999 cuando comenzó a trabajar en el entonces restaurante La Huerta.

En los albores del siglo 21 y tras cuatro años de rodaje en los fogones dio una vuelta de tuerca a su carrera, asumiendo en compañía de su socia la gestión y dirección de La Huerta.

Durante 13 años el local fue convirtiéndose en uno de los centros de la actividad social de la ciudad, desde su ubicación en el número 41 del salón de estar de Gasteiz, en plena calle Dato y a escasos metros de la estación de ferrocarril.

De La Huerta a La Regadera

En 2016 llegó un nuevo volantazo con la reinvención total del restaurante y cambio de denominación incluida. Dejó atrás la denominación de La Huerta para ser conocido como La Regadera y ya con Mikel Fiestras como único responsable y cabeza visible del negocio.

Después de ese cambio el restaurante vivió también los tiempos duros de la pandemia y asistió a un incendio en sus cocinas, en noviembre de 2021, como episodios más complicados.

Apertura de El Copetín

El cierre de La Regadera reduce las opciones de locales hosteleros en esa zona, animada en los últimos tiempos con la apertura de otro local de cafés y copas, bajo el singular nombre de El Copetín.

En octubre del pasado año levantó de nuevo la persiana el negocio donde antes se ubicó el Casablanca 3 y que ejerció de potente imán para los trabajadores de las oficinas cercanas a la hora de tomar su café con pintxo matinal.

Cierre de la Cafetería Río

El alta y baja de locales en los últimos tiempos en la calle Dato asiste también a otro cierre de un local hostelero también reconocido como es la cafetería Río. Hace ya varios meses que este local ha cerrado sus puertas dejando huérfanos de su café o copa a muchos gasteiztarras que tenían en este lugar un punto de encuentro y sitio desde donde disfrutar de la vida social con su estratégica terraza.

La baja de locales hosteleros se ve compensada con aperturas como la de la tienda Natura, en el local que ocupó durante décadas la firma de decoración Mosel, y también el supermercado Dealz ha dejado paso a su marca matriz PePco y donde acuden numerosos gasteiztarras en busca de algunos de los chollos que oferta.