Alumnado de Integración Social de Egibide ha elaborado una guía de buenas prácticas para que las empresas se animen a contratar a personas con discapacidad intelectual. Con el apoyo del centro de enseñanza, Fundación Vital y la asociación alavesa Har Eman, se van a repartir 1.500 ejemplares en papel en empresas alavesas.

La realidad indica que las personas con discapacidad intelectual tienen muchas más trabas a la hora de acceder a un puesto de trabajo en una empresa ordinaria. "Apenas tienen oportunidades", reconoce la directora de Fundación Vital, Arantxa Ibáñez de Opacua. De hecho, 67 de cada cien personas sin discapacidad intelectual están trabajando frente a veinte de cada cien con discapacidad intelectual, según los datos de Odismet, observatorio sobre discapacidad y mercado laboral.

Los propios autores de la guía constatan que, incluso las personas con discapacidad motriz lo tienen más fácil que las que tienen discapacidad intelectual. "Es un agravio comparativo", indica Idoia Moreno en la presentación de la publicación, acompañada por Carles Comas, otro de los estudiantes que ha trabajado en el manual.

Por ello, esta guía de buenas prácticas busca ser una herramienta fácil para las empresas. "Para que pongan el foco en las personas con discapacidad intelectual fijándose más en la persona que en la discapacidad, fijándose más en lo que puede aportar a la empresa", subraya Xabier López de Santiago, director de FP de Egibide.

Se trata de "poner en valor las aportaciones de las personas con discapacidad intelectual allí donde trabajan", apunta Rafael Abásolo desde la asociación alavesa Har Eman, que desde 2013 trabaja con personas con discapacidad intelectual.

Trabas y dificultades

La guía comienza explicando qué es la discapacidad intelectual, las dificultades que tienen quienes la padecen a la hora de acceder al mercado de trabajo para, a continuación, citar las razones por las que hay que apostar por la inclusión laboral y contratarles. Razones como que las personas trabajadoras con discapacidad intelectual son "muy responsables, constantes y con gran motivación, interés y capacidad para superar nuevos retos".

Beneficios para las empresas

Además, resalta la guía los beneficios para las empresas; beneficios como que hacen que la empresa sea más justa y amable, mejore el ambiente de trabajo, reciba ayudas por la contratación, fomente la igualdad, mejore su imagen..., además de que le permite trabajar con personas que hacen bien su trabajo.

El manual explica igualmente los pasos que una empresa debe seguir para contratar empleados con discapacidad intelectual: llamar a Gureak, obtener información sobre temas legales y económicos y dar cuenta de las características del puesto de trabajo. A continuación, desde Gureak le orientarán en el proceso de selección hasta entrevistar al aspirante al puesto de trabajo antes de formalizar el contrato.

"La inclusión es una necesidad y un beneficio para la sociedad, el reto está en aceptar que las personas somos diferentes", resalta la directora de Fundación Vital.