Como esperaban en la zona de Víllodas, las aguas del Zadorra terminaron por salir a la carretera en la zona del puente y fue necesaria la ayuda de los Bomberos Forales para que varias personas pudieran cruzar el cauce, dejando los vehículos al otro lado del río.

El presidente de la Junta Administrativa de la localidad, Miguel Ángel Monreal, relataba a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA que fue necesario volver a pedir esa ayuda "y la situación es de hartazgo, porque se repite continuamente. Ni lo solucionan ni vienen a ver lo que pasa", señalaba. Por esa razón anticipaba a este diario que tiene intenciones de hablar con los pueblos por los que discurre el cauce "para organizar una manifestación en Vitoria, porque lo que está pasando es una vergüenza".

Por su parte, en la cuenca del Zadorra, en Trespuentes, el río ocupó el parque, el campo de fútbol y parte de la carretera que lleva a Vitoria, según el presidente de la Junta, Davide di Paola, "aunque se puede salir en dirección a Estarrona", como sucedió a principios de este mes, señalaba con resignación. En ambos casos se mostraban muy inquietos ante las noticias de que la crecida iba a continuar al menos hasta las cuatro de la madrugada, según les habían manifestado los servicios de emergencia, ya que el problema no es la lluvia sino ella combinada con las temperaturas "que están produciendo el deshielo de la nieve caída".

Por su parte, en Kuartango, el río Baias había crecido de forma importante, pero no se había desbordado a primera hora de la tarde, según señalaba el alcalde, Eduardo Fernández de Pinedo. La ventaja que tiene el río en este lugar es que está encauzado y "por eso aún no se ha salido", algo que sí ocurrió con la anterior tormenta, llegando a anegar las piscinas.

En la zona de Rioja Alavesa, el lugar más sensible ante las lluvias son los riscos de Lapuebla de Labarca. La alcaldesa, Maite Córdoba, señalaba que de momento no se han producido desprendimientos, aunque el pasado lunes tuvo que comunicar a los servicios de emergencias la caída de algunas piedras que, en ningún caso, interrumpieron el tráfico entre Lapuebla y El Campillar.

Por su parte, en Montaña Alavesa se produjeron pequeños desbordamientos de algunos arroyos afectando a choperas o en las canalizaciones de aguas pluviales en el casco urbano de Maeztu, según comentaba el presidente de la Cuadrilla y alcalde de Arraia-Maeztu, Anartz Gorrotxategi. Esa incidencia en las choperas, frecuente por otra parte, afectaba más a la zona de Campezo.