- La Catedral Nueva de Gasteiz acogerá este próximo sábado 25 una misa solemne en memoria de todas las personas que han fallecido en Vitoria y en el conjunto de Álava tras la declaración del estado de alarma el pasado 14 de marzo. La eucaristía será presidida por el obispo de la ciudad, Juan Carlos Elizalde, acompañado por toda la curia diocesana, encabezada por el vicario general, Carlos García Llata.
Ante la dolorosa situación provocada por la pandemia y las consecuentes medidas impuestas por las autoridades para frenar los contagios y evitar la propagación del covid-19, muchas familias no han podido despedir a sus fallecidos con una ceremonia religiosa. Pasado este tiempo y una vez flexibilizadas las condiciones de movilidad y para celebrar reuniones, la Diócesis de Vitoria pretende así rendir un homenaje público a quienes han fallecido en la provincia durante este tiempo, así como arropar a sus familiares y amigos y, al mismo tiempo, dar las gracias a los médicos y al conjunto del personal sanitario y “a todos los hombres y mujeres de diversos sectores cuya labor fue esencial en los días más duros de la pandemia”, apuntó ayer el obispado en una nota. “La Diócesis quiere trasladar el mensaje principal de la Iglesia, transmitido generación tras generación, donde la muerte no tiene la última palabra, consumado en la resurrección de Jesucristo a una vida nueva”, remarcó la institución. El obispo centrará su homilía en alentar con este mensaje de esperanza a familiares, amigos y a toda la sociedad “desde esta profunda convicción cristiana, fe compartida con la inmensa mayoría de los fallecidos en este tiempo”.
La celebración del sábado contará con un estricto control de aforo, por lo que la Diócesis recomendó ayer seguirla en directo a través de su página web y sus canales de Facebook y Youtube. También recordó la institución que las misas de los días 25 y 26 en todas las parroquias e iglesias de Vitoria y Álava serán en memoria de todos los fallecidos durante la pandemia. La Diócesis invitó a los feligreses a asistir a ellas con todas las medidas indicadas de uso de mascarilla, gel hidroalcohólico y distancia interpersonal en bancos y a la hora de entrar, salir y comulgar.
A la Catedral Nueva asistirá una representación de las familias de los fallecidos, personal sanitario y de emergencias -quienes harán las lecturas y las peticiones-, así como autoridades locales e institucionales en representación de toda la sociedad vitoriana y alavesa. “La Iglesia ha estado presente y dispuesta siempre al conjunto de la sociedad, como parte del tejido social alavés, y en este momento quiere dedicar de manera especialmente solemne una misa para recordar a los cientos de fallecidos, rezando intensamente por todos y cada uno de ellos, y consolar así a todas las familias en el duro trance tras la perdida en estas circunstancias”, remarcó la Diócesis.
En otro orden de cosas, el abad de la Cofradía de la Virgen Blanca, Ricardo Sáez de Heredia, presentará mañana tanto el pañuelo como el postre conmemorativos del 125 aniversario de la tradicional procesión de los faroles, una celebración mediatizada este año por la pandemia del covid-19. El pañuelo, creado por la Cofradía de la Virgen Blanca, será presentado también por Luis Tamayo. El postre, creado por la Asociación de pasteleros y confiteros artesanos de Álava, ha sido bautizado como El farol dulce del 125 aniversario de la Procesión de los Faroles.