Llevamos más de un mes de confinamiento y viviendo escenas un tanto surrealistas en las calles, entre las largas colas que hay que hacer para ir a hacer la compra al súper, al tener que respetar la distancia de seguridad, o las nuevas recomendaciones de salir de casa con mascarilla puesta, pero en todo lo malo siempre hay algo bueno y en esta pandemia esas ventajas son la de una menor contaminación, el hecho de poder atravesar la ciudad en bus o coche antes que nunca y los mensajes de apoyo vecinal.