Vitoria - El proyecto del bus eléctrico inteligente (BEI) recibió ayer un nuevo impulso al aprobar la licitación del derribo de la parte del vivero municipal donde se construirán las futuras cocheras de Tuvisa. La junta de gobierno local acordó invertir 150.000 euros a este fin, y a través de este contrato se derribarán los elementos de la parcela del vivero necesarios para la posterior instalación de las cocheras de Tuvisa. En ese sentido, los trabajos afectarán a la vivienda y oficina, un hangar para guardar vehículos, una nave multiusos, una tejavana para guardar acopios y leña, el invernadero y una cabaña.
El gran bosque del vivero se mantendrá en su mayor parte, como parte del sistema de infraestructura verde de la ciudad y debido a su valor ambiental. En cuanto a las plantas que hasta ahora se cultivaban en el vivero, el servicio de parques y jardines ha reducido en gran medida su volumen al repoblar diferentes zonas urbanas de la ciudad en los últimos meses. El resto se ha trasladado al parque ambiental de Olarizu y a los huertos del botánico, donde se desarrollará el futuro del vivero municipal.
El Ayuntamiento aprobó la semana pasada la firma del convenio interinstitucional para construir la unidad funcional de carga del BEI en esta misma parcela, un sistema de carga lenta que contará con una inversión de 5,6 millones de euros. La construcción de las cocheras y talleres tanto para el BEI como para la flota de buses de la ciudad se acometerá por fases.
La primera corresponderá a las instalaciones necesarias para la unidad funcional de carga del autobús inteligente. Para poner en marcha esta actuación, las instituciones (Gobierno Vasco, Ayuntamiento y Diputación) sellarán este convenio de complementariedad, para financiar el proyecto, que permitirá al Ayuntamiento de Vitoria licitar la obra este año.
De los 52.000 metros cuadrados que ocuparán las nuevas cocheras, 16.000 metros cuadrados corresponderán a la citada unidad funcional de carga del BEI, que incluye la infraestructura necesaria para garantizar la operatividad del bus eléctrico inteligente. Las instalaciones contarán con plazas de aparcamiento para los trece autobuses eléctricos y la marquesina correspondiente, taller mecánico, lavaderos de las unidades, vestuarios, cierre perimetral y urbanización.
En una fase posterior, se deberá acometer la construcción de las cocheras, talleres y nuevo edificio administrativo de Tuvisa en la misma parcela. Las instalaciones previstas contarán con unas oficinas y vestuarios divididos en dos plantas, ocupando un área total de 1.878 metros cuadrados, un almacén de 1.213 metros cuadrados y un taller de 2.884 metros cuadrados, en los cuales se diferenciarán zonas para el mantenimiento exclusivo del BEI.
Las zonas de limpieza serán comunes a todas las diferentes tipologías de autobuses y ocuparán un área de un total de 1.858 metros cuadrados. La zona cubierta de andenes, dimensionada para un total de 110 autobuses y considerando la futura electrificación de toda la flota, contará con una marquesina de 10.029 metros cuadrados, en la cual se instalarán paneles fotovoltaicos para maximizar la eficiencia energética.
El acceso peatonal y de atención al cliente se efectuará desde la calle Juan Crisóstomo de Arriaga y el acceso rodado para los autobuses se realizará desde la Avenida del Zadorra, alejando el tráfico de autobuses de las viviendas más próximas. El presupuesto base de licitación de esta segunda fase de construcción asciende a los 17.895.628 euros y un plazo de ejecución de nueve meses.