valdegovía - El grupo municipal de EH Bildu Gaubea logró que el pleno del Ayuntamiento de Valdegovía del pasado mes de diciembre aprobara una moción, para que la institución local desarrolle un plan para que no desaparezcan las colmenas antiguas de Quejo y para que implique en esa protección a otras instituciones públicas.
El grupo explicaba en su moción que la existencia de este tipo de colmenas en nuestro municipio se le puede definir como patrimonio cultural de Valdegovía, ya que refleja una historia etnográfica muy antigua, como era la explotación de las abejas para la obtención de la miel, con un sistema artesanal y natural como eran las colmenas en troncos de madera que se vacía su interior, para que las abejas realizaran sus paneles. Para la protección de los troncos se cubrían con tejas, que desde muy antaño se realizaban en nuestros pueblos. Hay documentación de una antigua tejera en la localidad de Espejo hacia el año 1453.
Añade la moción de EH Bildu que hay dos circunstancias que lo hacen además muy interesantes. La primera, que se rodeaba de tapias de piedra, no solo para proteger de los vientos, sino para evitar que los osos atacasen las colmenas y les robasen la miel.
Tras mencionar que este abejas se encuentra en la localidad de Quejo, planteaba al resto de concejales que asumieran la importancia de implicar en su conservación a las instituciones administrativas, partiendo del propio Ayuntamiento de Valdegovía, tal y como se aprobó.
Elementos menores Estas abejeras están casi en un estado de abandono, aunque hace poco más de una década se estudiaron y catalogaron gracias a Victorino Palacios Mendoza y José Rodríguez Fernández, cuando elaboraron el libro de Elementos menores del Patrimonio Arquitectónico en la Cuadrilla de Añana.
En la ficha dedicada a la abejera de Quejo describen que se trata de un conjunto de vasos o 'cuezos' dispuestos verticalmente formando pequeños grupos. Cuando se realizó esta catalogación quedaban 11 cuezos en la banda superior izquierda, 24 en la intermedia izquierda, 15 en la derecha y 7 en la inferior izquierda.
Describen que cada 'cuezo' es un pedazo de tronco de unos 80 centímetros de altura y 40-45 de diámetro. En interior esta vaciado y con unas maderas en forma de cruz para que de allí cuelguen las abejas sus panales y en el frente se aprecian varias 'piqueras', agujeros para entrar o salir. Para proteger las abejeras se colocaban unas tejas de cerámica. - Pablo José Pérez