amurrio - El saneamiento de la cuenca del Alto Nervión está cada vez más cerca de hacerse realidad, pese a sus tres décadas de retraso. De hecho, si a finales de noviembre el Consejo de Ministros, a propuesta del ministerio para la Transición Ecológica, daba luz verde a la depuradora de Basaurbe -la que dará servicio a los municipios de Llodio y Orozko-, por un valor estimado de 15.164.299 euros, ayer hizo lo propio con la que faltaba, es decir, la de Markijana.

Será la tercera y última estación depuradora de aguas residuales prevista para esta castigada zona alta del río Nervión -tras la construcción y puesta en marcha de la de Orduña por el Gobierno Vasco hace ya unos años- que, por un presupuesto base de licitación de 18.806.205 euros, tratará los vertidos urbanos y los industriales compatibles de las poblaciones ayalesas de Saratxo, Amurrio, Murga, Luiaondo y Olabezar, donde reside una población de 15.074 habitantes.

Para dar respuesta a los requisitos del agua tratada y la necesidad de albergar todas las instalaciones en el interior de un edificio para su integración paisajística, arquitectónica y medioambiental, al igual que en la Edar de Basaurbe, se ha seleccionado un tratamiento biológico mediante membranas de ultrafiltración.

Los colectores de llegada a la depuradora son unitarios y de nueva construcción y se encuentran definidos en un proyecto independiente.

expropiaciones De hecho, fue el pasado mes de junio cuando el ministerio de Transición Ecológica puso en marcha la licitación del proyecto de los colectores, que tendrán una longitud de veinte kilómetros y se llevarán casi la mitad del presupuesto de los casi cerca de 79 millones de euros que, se estima, costará la operación total. Para que eche a andar la obra de los conductos se han tenido que expropiar 7.653 metros cuadrados de terreno. - A. Oiarzabal / Foto: P.J.P.