el mercado medieval de Gasteiz cerró a primera hora de la noche de ayer una nueva y exitosa edición, y ya van 18, que ha atestado durante todo el pasado fin de semana el Casco Viejo de la capital alavesa, animado además por una espléndida meteorología. 34 compañías y más de 132 artistas han tomado parte en esta cita ya clásica del otoño en la ciudad, por donde se han distribuido 260 paradas de artesanía, alimentación y restauración, así como 61 talleres de oficios antiguos. La almendra, transformada a imagen de aquel importante cruce de caminos entre el norte y el sur de Europa que la aldea fue hasta finales del siglo XIV, ha vuelto a divertirse al ritmo de los malabaristas, los saltimbanquis y los juglares, se ha llenado de vida animada por el vigor de los comerciantes y ha disfrutado de lo lindo gracias a los espectáculos, itinerantes o no, que se han sucedido en sus plazas y calles, dirigidos a toda la familia. Tras los últimos espectáculos nocturnos de ayer, tocó recoger y comenzar a pensar ya en la edición del mercado del próximo 2020. Vitoria vuelve a ser desde hoy una ciudad del siglo XXI. La nota negativa de la presente edición la protagonizó en la mañana del sábado la intervención de la Policía Local de Gasteiz, que procedió a la clausura de una taberna del mercado medieval, ubicada en lo alto de la almendra, por conservación inadecuada de alimentos frescos y prácticas de manipulación incorrectas. El producto que se iba a comercializar en este puesto, que sumaba un total de 880 kilos de carne, fue decomisado y posteriormente destruido.
