Vitoria - Iturrieta (Aramaio), Kuartango (Zuazo de Kuartango) y Trebiñu (En Askartza, Trebiño), que ya forman parte de Euskal Sagardoa, están consiguiendo que la sidra alavesa se convierta en toda una bebida en alza. A la vista está el éxito que tuvo la primera fiesta alavesa organizada el pasado sábado en la plaza del Machete de Vitoria en torno a esta bebida, a la que además de estas tres instalaciones alavesas acudieron otras cinco guipuzcoanas bajo el paraguas de dicha denominación de origen. “Estamos todos muy contentos porque hubo mucha gente, aunque más por la tarde que por la mañana, eso es cierto, pero no paramos de servir sidra”, resalta Juanjo Peciña, responsable de Iturrieta Sagardotegia, la primera iniciativa que se creó al respecto en Álava hace una veintena de años, enclavada en un paisaje espectacular de Aramaio, donde tiene unos 1.200 árboles propios, gracias a los cuales tiene manzanas propias.
Un evento que, sin duda, como subraya, contribuirá a dar conocer todavía más que Álava tiene sidra propia. “Queda trabajo para hacer para darla a conocer, pero por nuestra participación en Ardoaraba y en iniciativas como la fiesta de Euskal Sagardo Araba, creemos que sí que está llegando que Álava tiene manzanas y de que se puede hacer buena sidra. Ahora tenemos también la referencia de nuestras propias sidrerías, porque antes la gente siempre iba a Astigarraga o a otras guipuzcoanas y, aunque siguen yendo, muchos otros prefieren quedarse aquí porque creo que somos sidrerías que estamos haciendo un buen trabajo y la gente, desde luego, nos da el respaldo. El ejemplo es que en temporada estamos a tope”, afirma.
Con la entrada en la denominación de origen ahora están implementando el desarrollo de la manzana autóctona, “pero, claro, para que haya suficiente se tiene que poder plantar aquí porque es importantísimo tener manzana propia”. De ahí que Peciña pida más apoyo para la implantación de nuevos manzanales, “para que haya más facilidades de acceso a poder plantar, porque necesitamos pequeñas producciones y no tanto grandes extensiones”.
Un apoyo institucional importante también para experimentar con variedades antiguas “y ver en qué partes del territorio podrían darse bien para la conservación de variedades”. Todo ello, como subraya, porque “hay que tener en cuenta que hay que dignificar a la manzana para que el consumo de la sidra sea de categoría y no de segunda, como ha sido hasta ahora”.
Innovaciones En estas mismas ideas también hace hincapié su hermano Benito Peciña, que está al frente de Kuartango Sagardotegia, en la que también hacen sidra de elaboración propia. “Si las instituciones apoyan las plantaciones de manzano, podrán potenciar más en Álava que haya sidra propia, no sé si tan de buena calidad o mejor, pero sí que distinta” ya que “nos queda por hacer mucho, pero sí que creo que se empieza a conocer”.
En su caso, en la fiesta de la sidra alavesa consiguió una invitación para ir al salón internacional de sidra de Sisga, “para que presentemos algún producto de los que hemos hecho porque a los enólogos y catadores la novedad de la primera sidra de fuego del País Vasco les encantó”, enfatiza. Así, como cuenta, después de varias pruebas y un laborioso proceso de más de un año con el producto, para que quedara bien, están contentos con el resultado de esta novedosa bebida de 10-11 grados, que se une junto con otra nueva creación: sagartxo, un refresco de sidra al limón. “Llevo más de 20 años elaborando y ahora estamos intentando elaborar la sidra en todas sus ramas. Naturalmente, vamos poco a poco e intentaremos tocar otras sidras como la brut, más espumosa, pero de momento tenemos esos cinco productos: sidra natural, zumo, vinagre, refresco al limón y sidra de fuego”.
Aparte, Benito Peciña está enfrascado en otro proyecto: el centro de interpretación de la sidra de Álava, que permitirá conocer mejor el mundo de la manzana y todos los productos que se pueden obtener de ella y su proceso de elaboración. “Tengo el concepto y los espacios definidos, pero todavía tengo que dotarle de contenidos, por eso ahora no me atrevo a dar una fecha de apertura”, detalla este hombre.
Iturrieta (en el barrio Arraga de Aramaio). Fue de las primeras que se creó en Álava, hace una veintena de años. Está al pie de Orixol, al lado de Amboto y Udalaitz, con Aitzgorri en el horizonte. En ella se puede disfrutar del zumo de manzana y de la sidra ecológicos y naturales bajo la denominación Euskal Sagardoa. En temporada de txotx, del 15 de enero a mayo, tiene abiertas sus kupelas. De mayo a finales de julio se puede disfrutar de su sidra embotellada, con un menú mas amplio.
Kuartango (Zuazo de Kuartango). Esta sidrería elabora sidra natural dentro de los parámetros de Denominación de Origen de Euskal Sagardoa, zumo de manzana ecológico 100% natural, sin ningún tipo de aditivos y vinagre de manzana de la misma calidad. Este año ha presentado dos productos nuevos: refresco de sidra al limón y sidra de fuego, con 10-11 grados. También quiere hacer el proyecto del centro de interpretación de la sidra de Álava. La idea es tener allí un pequeño museo, donde se explicará todo el proceso de elaboración de la sidra, desde el momento en el que se planta un manzano hasta el momento en el que se disfruta de la sidra embotellada. Se pretenden hacer visitas guiadas por el tolare o bodega, la zona de pasteurización de zumo? Disponen de un campo de germoplasma donde se podrán observar diferentes tipos de manzanos y ver las diferencias que existen entre ellos. La visita al centro finalizará con una serie de catas de diversos tipos de manzanas y diferentes tipos de sidras.
Trebiñu (Trebiño). Está en Askartza, un pequeño pueblo de Trebiño y la gestiona la familia Markinez. Su historia nació en 1998, cuando plantaron los primeros manzanos. Hoy en día han aumentado su producción de sidra Trebiñu gracias a los 2.500 manzanos que tienen, con los que elaboran unos 10.000 litros de sidra para consumo en restaurante y para la venta en botella, tanto en Trebiño como en algunos bares y locales de Vitoria, entre otros.
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Sidrerías. Son las que hay en Álava. Se trata de las de Iturrieta (Aramaio), Kuartango (en el antiguo balneario) y Trebiñu (Trebiño).
