vitoria - El consejo de seguridad nuclear (CSN) advierte de carencias en la planificación de las tareas de predesmantelamiento de la central nuclear de Santa María de Garoña, lo que repercute en la estimación de riesgos radiológicos de los trabajadores.

Según los últimos datos del CSN, referidos a una inspección en la central burgalesa realizada el pasado mes de marzo para comprobar la aplicación de medidas de protección radiológicas, se desprenden irregularidades en las dosis de radiación recibidas, tanto a nivel individual como colectivo, de los trabajadores. Así, apunta que el “indicador dosis oficial máxima individual no es coherente con el valor de nivel administrativo de dosis”. Ante esta situación, “se exigen reestimaciones contantes de los objetivos de dosis de trabajo y de los anuales operacionales de la instalación”.

El acta del regulador atómico relativa a la “inspección para comprobar la aplicación de medidas para la protección ocupacional (...) en la situación actual de cese definitivo de la explotación de la central”, señala que, para establecer los criterios de garantía radiológicos, desde la última inspección el titular ha realizado diez reuniones extraordinarias: cuatro en el año 2017, tres en el año 2018 y otras tres este año hasta auditoría del pasado marzo.

En las actas del comité Alara, donde se aprueban o revisan los objetivos de dosis, “no se recogen objetivos para la dosis máxima individual anual y no hay aprobación del objetivo de dosis individual por parte del director”, señala. Alara es el acrónimo en inglés de As low as reasonably achievable, es decir, “tan bajo como sea razonablemente alcanzable”, uno de los principios básicos para establecer cualquier medida de seguridad radiológica.

renovar la señalización El acta del CSN incide también en la “necesidad de renovación de la señalización de zona controlada de permanencia limitada, debido a que es difícil distinguir los riesgos de contaminación y/o radiación”, indica el escrito.

La central burgalesa de Garoña no tiene actividad desde diciembre del año 2012 y su clausura definitiva se produjo el 1 de agosto del año 2017. Desde esa fecha se encuentra en fase de predesmantelamiento hasta que arranque, previsiblemente en el año 2021, la fase de demolición de las instalaciones de la planta. - Efe