Vitoria. Aguinaco se ha referido en rueda de prensa a esta cuestión, agravada tras las lluvias del lunes y que si se combina con unas altas temperaturas, en los próximos días podría perjudicar a la uva y afectarla "con una podredumbre" que, a falta de poco tiempo para la vendimia, los viticultores no podrían tratar de forma adecuada.

"La vendimia está cerca, pero estas lluvias pueden tener una afección en función de las condiciones climatológicas que se puedan dar estos días, porque aunque no han tenido una afección directa para la salud de la uva, la humedad y las altas temperaturas pueden generar un riesgo de podredumbre y una enfermedad que afectaría a la calidad de la uva", ha explicado el diputado.

Esta no es la única dificultad a la que han tenido que enfrentarse los productores este año, ya que las lluvias y granizos de los últimos meses han dañado parte de los viñedos alaveses y han obligado a tratar las viñas de forma extraordinaria para poder garantizar su buena marcha de cara a la vendimia.

Ahora, en esta fase final en la que es difícil la aplicación de los productos fitosanitarios, las próximas jornadas serán "decisivas" para evitar daños en la uva en las zonas del territorio en las que más ha afectado la lluvia.

"Si la climatología se mantiene en condiciones más bien frescas, con un poco de aire, la situación se podrá controlar, pero si hay altas temperaturas puede provocar que en algunos pueblos haya que adelantar la vendimia para evitar que la enfermedad avance", ha analizado Aguinaco, que ha augurado una vendimia "un poco más compleja".