Vitoria - Los dos ertzainas que tuvieron el primer contacto con el acusado de asesinar a una bebé en Vitoria y de intentar matar a su madre afirmaron ayer que el hombre no tenía ideas delirantes sino plena consciencia de los hechos y que les dijo claramente que había matado a las dos, a la madre y a la niña.

Ambos remarcaron en el juicio con jurado que empezó el pasado martes en la Audiencia Provincial de Álava que el procesado, Daniel, un profesor de música sevillano, mostró resistencia al ser detenido, pero que después estuvo tranquilo, no reflejó ningún desequilibrio y respondió de forma coherente a las primeras preguntas que le hicieron. El acusado, sin embargo, afirma que actuó enajenado porque vio en la pequeña la “semilla del mal” y él, como “trabajador de luz” que era, debía proteger a la humanidad frente a la oscuridad.

En la jornada de ayer declararon nueve agentes de la Ertzaintza, entre ellos los primeros que acudieron al domicilio de la calle Libertad donde se produjeron los hechos en la madrugada del 25 de enero de 2016 y otros que tuvieron contacto con el acusado ya en comisaría. Además de los dos agentes que entraron en el piso y que redujeron y detuvieron al acusado, testificaron los que se toparon con la madre de la niña en la escalera en estado de shock, muy nerviosa y ensangrentada, y los dos ertzainas que estuvieron con la bebé, Alicia, de 17 meses, a la que encontraron en el suelo de la calle. “La nena respiraba, tenía los ojos abiertos, no lloraba”, explicó uno de los policías, que estuvo hablándole para que siguiera respirando, y que trató de atenderla lo mejor posible hasta que llegaron los médicos.

Mientras eso sucedía en la calle, dentro de la casa, los dos agentes que entraron se toparon con el hombre, ensangrentado, con medio cuerpo fuera del balcón-mirador por el que poco antes había lanzado a la niña, como él mismo reconoció.

Los ertzainas explicaron que le pidieron que se metiera dentro, que no les hizo caso y que por ello tuvieron que hacerlo ellos. Añadiendo que en ese momento se resistió con puñetazos y patadas antes de ser reducido y esposado. Después, preguntado por lo que había sucedido, respondió: “Las he matado a las dos, a la madre y a la niña”, sin que en ningún momento hablara de demonios ni de semillas del mal.

Sobre por qué lo había hecho, les dijo que “era lo mejor para todos y para ellas. Estaba abusando de la niña, se ha despertado la madre, hemos peleado y las he matado”, recordó uno de los policías. También la madre de la niña, una joven llamada Gabriela, que tenía entonces 18 años y residía en Burgos, dijo a los agentes que le atendieron en el lugar que cuando se despertó pensó que el acusado, al que había conocido pocas semanas antes a través de una red de contactos, estaba abusando de su hija. Además, la joven afirmó que el procesado había tirado a su hija por la ventana, que intentó lo mismo con ella, que le clavó un cristal y que ella también le agredió para defenderse, añadieron los ertzainas.

El tribunal también escuchó la declaración del instructor del atestado y de otro ertzaina que estuvieron con Daniel en la comisaría unas tres horas después del trágico suceso. El primero describió que en dependencias policiales el acusado, a diferencia de lo ocurrido horas antes, mantuvo un discurso “inconexo” e “incoherente”, no daba muestras de entender lo que se le decía, tenía la “mirada perdida” e incluso tuvo una actitud desafiante. Hablaba de que “fueran a por su madre en un helicóptero”, relató. “Yo creo que no quería colaborar”, opinó el otro de los ertzainas que estuvo con el acusado en comisaría.

La Fiscalía ha pedido para el acusado la prisión permanente revisable, mientras que la defensa alega que el presunto asesino padece una grave esquizofrenia paranoide y solicita que se le aplique la eximente completa por enajenación mental. El juicio continuará el lunes con las declaraciones de más ertzainas y varios peritos médicos. - Efe

Acusación y defensa. La Fiscalía ha pedido para el acusado la prisión permanente revisable, mientras que la defensa alega que el presunto asesino padece una grave esquizofrenia paranoide y solicita que se le aplique la eximente completa por enajenación mental.

Próxima sesión. El juicio con jurado popular por el asesinato de la bebé Alicia continuará el lunes con las declaraciones de más ertzainas que participaron en el caso y varios peritos médicos.