VITORIA - La soleada y concurrida jornada de ayer en las instalaciones municipales de Mendizorroza se vio trastocada a primera hora de la tarde por un imprevisto que obligó a cerrar temporalmente la mitad de su piscina tropical, a la que van a parar los toboganes. La inoportuna indisposición de un bañista, que contaminó las aguas de esta pileta con heces, paralizó la actividad de uno de los espacios más transitados de Mendi mientras los termómetros superaban ampliamente los 30 grados.

El suceso tuvo lugar pasadas las 16.00 horas y vetó el baño durante cerca de dos horas, el tiempo que necesitó la empresa de limpieza para volver a purificar el agua y que el cloro se estabilizase. Por desgracia para los usuarios, que habitualmente se acercan a esta piscina atraídos por los toboganes, estas atracciones quedaron también cerradas durante este tiempo. Para impedir el acceso a la zona, los socorristas colocaron vallas. Se trata del protocolo habitual que se lleva a cabo en estos casos, que por otra parte no son extraños durante el verano. “Hoy que hace tanto calor es una putada”, confesó un usuario a este periódico poco antes de que la piscina reabriese de nuevo. - C.M.O. / Foto: A. Arrieta