No hay tiempo que perder. Un monovolumen ha perdido el control en Vitoria con tan mala suerte que ha chocado contra un caserío. Fruto de este brutal impacto, hay 14 víctimas repartidas en dos focos, aunque todas ellas con el mismo peligro, dado que las llamas han alcanzado al caserío, con sus residentes dentro de él, y no se descarta, además, que lleguen al depósito de gasoil del vehículo con el riesgo de que estalle con seis ocupantes en su interior. Sólo una rápida actuación, con los conocimientos oportunos, puede salvar estas 14 vidas en medio de este completo caos. Un final feliz, que por fortuna, fue el que sucedió el pasado 24 de mayo en Vitoria, si bien, se trató únicamente de un simulacro. En concreto, del que llevó a cabo el Colegio de Enfermería de Álava, como punto final al curso de Experto Universitario de Urgencias, organizado por la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud.
Por noveno año consecutivo, los Bomberos de Vitoria y DYA Álava volvieron a colaborar en esta práctica simulada, en la que los estudiantes aunaron conceptos de catástrofes, trauma y soporte vital en un solo ejercicio, llevado a cabo en el parque de salvamento de Gasteiz, desde las 17.00 horas. En total, la duración de este accidente simulado de monovolumen contra un caserío, fue de dos horas, desde la intervención hasta el repliegue. Como si de un caso real se tratase, nada más llegar al escenario del suceso, los 35 alumnos del curso tuvieron que reconocer el espacio y evaluar a los heridos, los seis ocupantes en el vehículo y el resto de víctimas atrapadas en el edificio con daños estructurales y en llamas. Todo un escenario catastrófico, donde hubo que determinar daños por inhalación de humo, quemaduras y traumatismos. No en vano, en todas sus ediciones, el curso concluye con la celebración de un simulacro que sirve para poner en práctica lo aprendido durante las sesiones teóricas para hacerlo lo más didáctico posible, con varios focos de atención, para que los enfermeros tengan que buscar la manera de dividir los recursos.
La evacuación Seguidamente, clasificaron, atendieron y evacuaron a las posibles víctimas. Los intervinientes se agruparon en un equipo de mando que acudió en un Vehículo de Intervención Rápida (VIR) formado por dos personas y cuatro equipos sanitarios de cuatro miembros que salieron secuencialmente en una noria simulada. Además, en el escenario se desplegó un puesto de mando sanitario avanzado en una tienda de Bomberos.
Para finalizar, las víctimas fueron evacuadas a los centros hospitalarios en tres ambulancias que puso DYA Álava. Rescate superado. Y con nota.