Corrían poco menos de las diez y media de la mañana cuando las plataformas de pensionistas de Euskadi y Navarra se reunían ayer en la casa de asociaciones Rogelia de Álvaro, de Gasteiz, convirtiendo así a la capital alavesa en el embrión de la unidad de las protestas de jubilados de Euskal Herria. No en vano, por primera vez, una treintena de representantes de este tipo de colectivos de Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra, se juntaban en esta ciudad, “por ser la más equidistante” con el fin de dar el visto bueno a la creación de una coordinadora que a partir de ahora aspire a unificar sus movilizaciones, para meter más presión al gobierno de Rajoy, tras los “nulos o muy escasos compromisos adquiridos”. En este sentido, tras tres horas aproximadas de sesión, sus integrantes fijaron dos fechas clave: los próximos 5 y 26 de mayo, cuando pretenden llenar las calles de las cuatro capitales.

Según explicó a este diario el portavoz de Arabako Pentsionistak Lanean, Iñaki Martín, nada más acabar este encuentro que se prolongó hasta algo más de las 13.00 horas, “hemos fijado dos fechas para las manifestaciones: la del 5 de mayo, que coincidirá con la convocatoria de la plataforma estatal, porque hemos decidido secundarla, y, por otra parte, la coordinadora de pensionistas de Euskal Herria ha acordado convocar una propia para el 26 mayo para hacer una gran marcha en las cuatro capitales”.

La elección de esta última movilización, que aspira a repetir el éxito de la del pasado 17 de marzo, no es casual, ya que se hace como respuesta a la posible aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, puesto que el día 22 de mayo, se espera que las cuentas públicas pasan su último test.

Martín destacó que en esta gran movilización del 26 de mayo “tratarán de que las que se hagan en la cuatro ciudades coincidan en el horario”, por lo que aún está por determinar el momento exacto en el que se iniciarán. Lo mismo pasa con el recorrido que tendrá tanto en Álava, como en Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra. “Veremos en cada sitio de qué lugar partirá. Esto queda pendiente. En principio, lo que sí que nos corría cierta prisa y urgía era concretar las fechas de esas dos manifestaciones”, aclara el representante de Arabako Pentsionistak Lanean. Mientras tanto, “las plataformas de Euskal Herria mantenemos las movilizaciones de todos los lunes en todas las ciudades y pueblos”.

La cita de la pasada jornada también cumplió su objetivo inicial, el de conseguir que tanto Euskadi como Navarra dieran sus respectivas luces verdes a la creación de una nueva comisión permanente de las plataformas y asambleas de pensionistas de Euskal Herria para unificar movilizaciones y todo tipo de iniciativas, ya que tal y como detalla Martín, “hemos dado el visto bueno para hacerla y nos hemos pasado los teléfonos para crear esta coordinadora para las cuatro capitales”.

En cualquier caso, Martín dejó claro que la asamblea de ayer también sirvió para “ratificarse” en las reivindicaciones fundamentales “que estamos manteniendo como eje y que seguiremos defendiendo en las movilizaciones”. En concreto, para garantizar este sistema público “digno” de pensiones, que demandan a los gobiernos de Madrid, Gasteiz e Iruña, los jubilados seguirán solicitando una pensión mínima de 1.080 euros, que la revalorización de las pensiones sea según el Índice de Precios al Consumidor (IPC), además de rechazar la brecha salarial de las pensiones y estar en contra de “todas las reformas laborales y de pensiones que se han hecho hasta ahora”. Asimismo, se oponen a que las prestaciones se establezcan de acuerdo al factor sostenibilidad.

la comparecencia Cabe recordar que la víspera de esta reunión, Arabako Pentsionistak Lanean se concentró frente al Parlamento Vasco bajo el lema Pensión digna. 1.080 euros, el día en el que en la comisión de Empleo, Políticas Sociales y Juventud de la Cámara vasca comparecía, entre otros representantes, el presidente de esta agrupación, Armado Aulestiarte, para exigir que la pensión mínima llegue a los 1.080 euros.

Aulestiarte recordó, por ejemplo, que en Euskadi una de cada tres pensiones es inferior al Salario Mínimo Interprofesional, por lo que volvió a reclamar que se establezca en el País Vasco un complemento para que las pensiones mínimas alcancen los 1.080 euros. Sin embargo, finalmente esta petición no se aprobó, motivó por el que los pensionistas acusaron al Parlamento Vasco de “no dar respuesta a sus demandas”, dado que, en su opinión, los argumentos empleados por los grupos parlamentarios que votaron en contra son “inaceptables, ya que la falta de competencias alegada no exime a los parlamentarios vascos de su responsabilidad”.

De hecho, como destacó ayer Xabier Isasa, portavoz de la plataforma de pensionistas de Bizkaia, en nombre también de las plataformas de Euskal Herria al poco de celebrarse esta reunión de ayer en Vitoria, “hemos conseguido que el grave problema de las pensiones entre en la agenda política de las instituciones y partidos políticos, pero sus compromisos han sido nulos o muy escasos. Ante esta situación, nos vemos en la necesidad de convocar unas nuevas manifestaciones generales en Euskal Herria que obliguen a los gobiernos de Madrid, Vitoria y Pamplona a tomar medidas inmediatas para mejorar nuestras pensiones y garantizar un sistema público digno”.

Los pensionistas alaveses ya habían advertido con sus protestas de cada lunes de que “no se iban a contentar con las migajas” y que nada les iba a frenar. El primer día de esta semana entre 800 y 1.000 de ellos se concentraron en la Plaza Nueva de Gasteiz, día en el que anunciaron que para el siguiente lunes, el día 23, volverán a protestar al mediodía en este mismo punto, sólo que con una salvedad: a continuación, irán en marcha hasta el Instituto Nacional de la Seguridad Social, como ya prometieron hacer cuando avisaron que tenían todo un calendario de acciones para asegurarse de tener unas dignas pensiones.

Acuerdos. Las plataformas de pensionistas de Euskadi y Navarra acordaron ayer en Vitoria fijar dos grandes manifestaciones. Una será la del 5 de mayo, tras secundar la movilización de la plataforma estatal. La otra es una convocatoria propia de la coordinadora de pensionistas de Euskal Herria para que el próximo 26 de mayo las calles de Gasteiz, Bilbao, Donostia e Iruña se llenen de forma masiva a favor de un sistema público digno de pensiones.

Protestas unificadas. Una coordinadora en Euskal Herria unificará a partir de ahora las movilizaciones de pensionistas de Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra.

El portavoz de Arabako Pentsionistak Lanean recuerda que pretenden lograr pensiones mínimas de 1.080 euros y revalorizarlas de acuerdo al IPC, entre otras.

Lo dice el portavoz de la plataforma de pensionistas de Bizkaia.