vitoria - La Fiscalía de Álava pide doce años de cárcel para un hombre acusado de violar a la hija de su pareja cuando tenía ocho años. El escrito de la acusación explica que el suceso tuvo lugar en abril de 2016 en una vivienda en Agurain cuando el hombre se quedó al cuidado de las tres hijas menores de su pareja. Así, y aprovechando que dos de ellas se estaban bañando, se quedó a solas con la tercera en un dormitorio y, con “ánimo libidinoso”, la desvistió en parte, le tocó la zona de los genitales e “introdujo su pene en la vagina de la niña”. Cuando a última hora del día llegó a casa la madre, la menor le contó que el procesado “le había tocado la vagina, le había metido el pene y le había dolido”.
La Fiscalía sostiene que los hechos constituyen un delito de agresión sexual y pide para el acusado, en prisión provisional desde el pasado febrero, doce años de cárcel y la prohibición de comunicarse y acercarse a la menor y a su domicilio a menos de 200 metros durante quince años. En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público solicita, asimismo, que el procesado indemnice con 7.000 euros a la niña por los daños morales causados. El juicio por estos hechos tendrá lugar la próxima semana en la Audiencia Provincial de Álava.
fuga de agua En otro orden de cosas, los Bomberos de Vitoria intervinieron la madrugada del jueves al viernes por una fuga de agua en una vivienda de la calle Honduras. Cuando llegaron los efectivos, las personas propietarias ya habían cerrado todas las llaves de la vivienda y, una vez localizado el origen de la fuga, les ayudaron a achicar el agua y procedieron a reestablecer el suministro eléctrico, según informó ayer el Ayuntamiento.
Asimismo, retiraron tejas sueltas del tejado de un edificio en Zabalgana y las lamas de aluminio de una persiana en la calle Ricardo Sacristán. También revisaron el origen de los cascotes que cayeron por el hueco de la escalera de una comunidad de la calle Santo Domingo del Casco Viejo, colocaron una chapa sobre una arqueta en la calle Vitoria, que tenía la tapa rota y encintaron un cuadro eléctrico en Medizabala, al que le faltaba la puerta. - Efe/DNA