vitoria - La tempestad no venía bautizada esta vez como sus predecesoras Ana y Bruno, pero se dejó notar ayer con mucha fuerza en todo el territorio alavés mientras sus vecinos se recuperaban de una larga Nochevieja. En esta ocasión, con el intenso viento del oeste como protagonista fundamental, que motivó la activación de la alerta naranja desde las 6.00 horas y hasta bien entrada la tarde y, ya en Gasteiz, la puesta en marcha del plan municipal de emergencia. Las rachas, que rondaron e incluso superaron los 100 kilómetros por hora en muchos puntos, provocaron la caída de ramas y el vuelco de varios contenedores, aunque por fortuna sin consecuencias personales que lamentar. Antes, una fuerte helada había sorprendió a los habitantes de numerosas zonas rurales.
En Vitoria, donde la alerta se extendió como en el resto de la provincia hasta las 18.00 horas, la racha máxima de viento alcanzó los 82,2 kilómetros por hora al filo del mediodía, según la información recopilada por la Agencia Vasca de Meteorología (Euskalmet). Lejos de los 113 registrados por ejemplo en la localidad vizcaína de Orduña, una de las que más sufrió las consecuencias de este vendaval de Año Nuevo, y todavía más de los 143 que se registraron también en la capital alavesa el pasado 10 de diciembre, todavía a las puertas del invierno, durante la primera ciclogénesis explosiva de la temporada. El temporal frustró también a muchos alaveses la sana costumbre de iniciar el nuevo ejercicio haciendo cumbre en alguno de los montes del entorno. Con todo, fueron unos cuantos los animados que desafiando al viento se acercaron por ejemplo hasta Zaldiaran, como marca la tradición, incluso montados sobre la bicicleta.
De vuelta a Vitoria, y como suele ser habitual en estos casos, el plan municipal de emergencia motivó la activación de numerosas medidas de prevención que en la medida de lo posible volvieron a evitar males mayores para sus transeúntes. De esta forma, y todavía cuando apenas había amanecido aún, se procedió al cierre de los parques y paseos de la ciudad con arbolado frondoso, en los que podía darse el riesgo de caída de ramas y árboles, y se dejaron además de recoger algunos contenedores para evitar que fuesen desplazados por el viento. Por otra parte, desde el área municipal de Seguridad Ciudadana se contactó con responsables de estructuras de obra, grúas y carpas instaladas en la capital alavesa para que las asegurasen en las horas previas a la activación de la alerta naranja.
Por lo demás, evitar que se produjesen daños personales volvió a tener mucho que ver con la adopción de varias sencillas medidas de prevención entre sus vecinos, como alejarse de cornisas, muros, árboles o vallas publicitarias y tomar precauciones en zonas de edificios en construcción o mal estado, así como cerrar y asegurar puertas, ventanas y toldos, retirar macetas y todos aquellos objetos que pudieran caerse a la calle. El teléfono de emergencias 112, donde puede notificarse cualquier situación de peligro, tuvo un inicio de año de lo más movido como consecuencia del temporal.
mejoría A la alerta naranja, que se esfumó cuando la noche volvió a caer ayer en el territorio, siguió un aviso amarillo por viento en zonas expuestas que a lo largo del día de hoy permanecerá aunque sólo en las vecinas Bizkaia y Gipuzkoa, por riesgo marítimo costero. Por lo demás, y según informó también ayer Euskalmet, la climatología experimentará a lo largo de la jornada de hoy una leve mejoría.
Según la Agencia Vasca de Meteorología, los cielos permanecerán muy nubosos y habrá precipitaciones débiles, ocasionalmente moderadas, aunque especialmente en la vertiente cantábrica, de madrugada y a primeras horas del día. El viento soplará del suroeste de componente flojo a moderado, con rachas fuertes y algunas muy fuertes en zonas expuestas. A lo largo de la tarde predominará la componente oeste. En cuanto a las temperaturas, éstas experimentarán una ligera subida, con los valores mínimos en moderado ascenso y los máximos sin cambios o en ligero ascenso.
De cara a la jornada de mañana, los cielos permanecerán un día más nubosos y con intervalos muy nubosos, especialmente en la mitad norte. Hay probabilidad de que se produzcan precipitaciones débiles en puntos de la mitad norte, especialmente en el este, mientras que el viento soplará del suroeste flojo a moderado, con rachas fuertes en zonas expuestas. Ya por la tarde, y siempre según Euskalmet, el viento soplará de componente oeste flojo a moderado, con rachas fuertes en zonas expuestas. Las temperaturas seguirán sin cambios o en ligero ascenso.
Tempestad sin nombre. Los fuertes vientos marcaron la madrugada y el día de Año Nuevo en Álava, con rachas que rondaron e incluso superaron los 100 kilómetros por hora en muchos puntos. Aunque en esta ocasión no se bautizó como las ciclogénesis previas, el temporal provocó la caída de ramas y el vuelco de algunos contenedores, aunque sin consecuencias personales que lamentar.
82,2 por hora en Gasteiz. En Vitoria, donde la alerta se extendió como en el resto de la provincia hasta las 18.00 horas de ayer, la racha máxima de viento alcanzó los 82,2 kilómetros por hora al filo del mediodía. Esto motivó el cierre de parques y paseos, aunque el tiempo ya mejorará hoy.