Espejo - La Fundación Nueva Cultura del Agua y la Diputación Foral de Álava han anunciado ya la celebración de una jornada de debate en torno al regadío de los Valles Alaveses, el embalse de Barrón y el resto de infraestructuras relacionadas con esa iniciativa, con la intención de facilitar una información exhaustiva a personas y colectivos, que llevan varios años movilizados en contra del embalse.
Esta jornada se llevará a cabo hoy, fecha en la que se celebrará en el centro social de Espejo una jornada-taller abierta al público donde se presentarán algunos resultados preliminares de este diagnóstico social, así como unos primeros resultados de otro trabajo que ha realizado un equipo interdisciplinar de investigadores, también vinculados a la Fundación Nueva Cultura del Agua, valorando desde una perspectiva técnica (socioeconómica, hidrológica, ambiental) el proyecto de modernización de regadíos.
Este taller, que comenzará a las cuatro de la tarde y se prolongará hasta las siete y media, tendrá un triple objetivo. Por un lado, presentar los resultados preliminares del diagnóstico social y técnico. Por otro, validar dicho diagnóstico, es decir, corroborar con los participantes los resultados, identificar errores o lagunas, e identificar temas que sean importantes y no hayan sido tratados. Y, en tercer lugar, hacer una primera lluvia de ideas sobre las posibles medidas que son necesarias para alcanzar la visión de futuro que colectivamente identifica la gente del territorio.
A este encuentro le seguirá otro, ya que en octubre se celebrará un segundo taller al que se invitará a los representantes de todos los sectores e intereses para trabajar más en profundidad las distintas medidas y alternativas que se han identificado a lo largo del proceso.
El proyecto de mejora y modernización del regadío de la zona regable de Valles Alaveses es una iniciativa para la puesta en regadío de 5.649 hectáreas en las zonas 1, 2, 3, 5, 6 y 7 de los Valles Alaveses, en los términos municipales de Armiñón, Lantarón, Ribera Alta, Ribera Baja, Añana y Valdegovía.
En el documento de trabajo se establecen captaciones de Quejo, Nograro y Barrio y las conducciones hasta el embalse de Barrón con capacidad para 120, 180 y 85 litros por segundo, respectivamente, que captan del orden del 60% de la aportación anual, deducido el caudal ecológico. Asimismo figura la captación en Osma, acondicionando el azud existente en el río Tumecillo o Húmedo, al sur de la localidad de Osma, con un caudal de 500 litros por segundo hasta el embalse de Barrón.
Como zonas de almacenamiento de agua aparecen la balsa de Barrón de 4,3 hectómetros cúbicos de embalse útil. Se abastecerá de las cuatro captaciones y del sobrante de El Molino y suministrará agua a las balsas de La Aloya y Villaluenga y a su propia zona regable. La balsa de Los Castros, de 0,268 hm³ de capacidad útil, suministrará agua a la Zona 7, y se abastecerá con los sobrantes del embalse de El Molino, por gravedad. La balsa de La Aloya, de 0,994 hm³ de volumen útil, suministrará agua a las parcelas dominadas por ella, y se abastecerá desde el embalse de Barrón, por gravedad. Y la balsa de Villaluenga, de 0,189 hm³ de volumen útil, suministrará agua a las parcelas dominadas por ella, y se abastecerá también desde el embalse de Barrón, por gravedad.
Oposición El colectivo No al embalse de Barrón cuestiona la necesidad de esa enorme obra, y se opone a la construcción del embalse porque, siempre según su juicio, afectará a explotaciones ganaderas, una carretera, paisajes y un importante patrimonio histórico.
Origen de las jornadas. Como consecuencia del diálogo mantenido entre la plataforma No al embalse de Barrón y otros colectivos con la Diputación Foral de Álava se han organizado estas jornadas participativas, que en su momento todos se comprometieron a llevar a cabo para recoger de esa manera las diversas opiniones y sensibilidades que existen sobre el pantano de Barrón, así como con el resto de la planificación del regadío en los Valles Alaveses.
Investigadores. Para organizar y coordinar esa actuación desde la independencia, un equipo de investigadoras de la Fundación Nueva Cultura del Agua, por encargo de la Diputación , ha realizado un proceso participativo para conocer qué modelo de desarrollo es deseable para el territorio de Valles Alaveses desde la perspectiva de sus habitantes, y qué papel juega en esta visión de futuro el proyecto de modernización y mejora del regadío de Valles Alaveses que impulsa la Diputación, según avanzó a este diario la coordinadora de esta actividad, Nuria Hernández Mora, de la citada fundación.