Vitoria - En el Día Internacional de las Desapariciones Forzadas, celebrada ayer, la familia de Borja Lázaro, el fotógrafo vitoriano desaparecido en la zona de La Guajira (Colombia) en enero de 2014, aprovechó para denunciar la “falta de interés” en las autoridades españolas a la hora de “presionar” al Gobierno colombiano en su búsqueda y cree que el caso está “parado”.

En opinión de Sergio Lázaro, hermano del desaparecido, Asuntos Exteriores se mueve “mucho” en cuestiones económicas y empresariales pero “deja mucho que desear” en estos casos personales. “Mi experiencia es bastante mala”, resumió ayer Sergio, quien, por el contrario, sí que quiso destacar la implicación del Ayuntamiento de Vitoria y, en concreto, del alcalde, Gorka Urtaran, al asegurar que se ha portado “muy bien” con su familia, aunque reconoce sus limitaciones.

Esta crítica que hace la familia de Borja Lázaro se une a la que este martes lanzó Reporteros Sin Fronteras (RSF), al denunciar la inacción de las autoridades colombianas. “A pesar de la intervención de las autoridades españolas, la investigación no ha permitido recopilar la más mínima información y se da hoy como un caso oficialmente cerrado”, constató RSF.

De hecho, tal y como puede precisar su hermano, a principios de agosto el enlace con el que se comunican en la Ertzaintza les trasladó que “no hay nada nuevo” de Borja Lázaro, de 34 años, el ingeniero informático y aficionado a la fotografía, que fue visto la última vez en la noche del 7 al 8 de enero de 2014 en la localidad costera de La Guajira y desde entonces no se ha tenido noticias de su paradero.

El joven se encontraba hospedado en una posada en Cabo de la Vela y estaba haciendo un reportaje fotográfico en la zona. Los últimos que le vieron fueron dos turistas alemanes, dos chilenas y unos colombianos con los que esa misma noche de la desaparición estuvo tomando unas copas.

Más de tres años después “no hay nada nuevo”, explicó a Efe su hermano, quien pone el acento en la “falta de interés” que observa por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores, a la hora de “presionar” a las autoridades colombianas en esta búsqueda. “Desde el principio he notado que algo no funcionaba aquí”, reflexionó Sergio Lázaro. - Efe