vitoria - “Hemos cambiado de pediatra a lo largo de estos meses en varias ocasiones y al final estamos como estábamos entonces. Sin pediatra en el centro de salud del Casco Viejo. Y lo malo es que se va a volver a repetir durante el mes de agosto, y no sabemos hasta cuándo”. Habla Amaia Barco, paciente del centro de salud de la calle Correría, que vuelve a ser víctima de uno de los males estructurales que más afectan al sistema público en su conjunto, la falta de este tipo de especialistas. Pese a contar con una de las poblaciones mayores más numerosas de toda la capital alavesa, no es menos cierto que la almendra medieval cuenta también con un número muy importante de pacientes en edad pediátrica que ante la ausencia de especialistas tienen que ser atendidos por médicos de familia.

“Considero que la población del Casco Viejo es muy grande, que dicen que quieren hacer del barrio un sitio mejor, pero lo fundamental y más necesario, que es que nuestros hijos estén bien atendidos, se está dejando totalmente de lado”, censura Barco en este sentido. La paciente cree que la “preocupación” de los padres de la zona “se puede entender”, ya que “se trata de la salud de nuestros hijos y no vemos ninguna solución al respecto”. “Este problema no está parado, sino congelado desde hace mucho tiempo”, critica esta usuaria.

atención bucodental En otro orden de cosas, un total de 31 dentistas alaveses revisarán a lo largo de este verano la salud bucodental de medio centenar de niños bielorrusos durante su estancia estival en Vitoria.

El Colegio de Dentistas de Álava recordó ayer que esta iniciativa cumple ya 20 años y que tiene como objetivo revisar la dentadura de estos niños que, con una media de doce años, presentan graves secuelas derivadas de la catástrofe de Chernóbil, que se traducen en caries y grandes destrucciones dentales. Desde hace tres años, además de las revisiones bucodentales, también se les realizan exámenes oftalmológicos. Según los datos en manos de la entidad colegial, los dentistas voluntarios han atendido a 1.600 menores durante este tiempo.

Cuando comenzó esta acogida el número de niños bielorrusos era bastante mayor, entre 120 y 130 menores, y su traslado se hacía en autobús. Ahora se han desplazado en avión 49, de los cuales 35 permanecerán un mes en Gasteiz y el resto, dos meses. Esta iniciativa, una vez más, contribuirá a que los chavales regresen a su país con una boca saneada y unos hábitos de limpieza y cuidados adquiridos indispensables para conservar la salud bucodental.

El diputado general de Álava, Ramiro González, recibirá el mediodía de hoy a estos niños y a sus familias de acogida en la institución foral. - C.M.O./Efe