Vitoria. El concejal de Espacio Público y Medio Ambiente, Iñaki Prusilla, y el jefe del Servicio de Planificación y Gestión Ambiental, Andrés Alonso, han analizado en rueda de prensa los resultados de este balance, que consolida logros en casi todos los campos.

Así, en materia de movilidad Vitoria logró sumar el año pasado 22 millones de viajeros en el transporte público -14,2 en el autobús urbano y 7,7 en el tranvía- frente al descenso del uso del vehículo privado, que de un 28 % de uso en 2011 ha bajado al 23,2 %, y el incremento de la bicicleta, de un 6,9 % a un 13,4 %.

Ello ha permitido que se reduzca el nivel de emisiones de CO2, lo que para Prusilla ha mejorado la calidad del aire, ya que "en el 77 % de los días se ha registrado buena o muy buena calidad del aire. Sólo se registró un día con mala calidad del aire, pero sin superar los valores límite registrados".

Es en la gestión de los residuos donde surgen los problemas. Aunque se genera un kilo de basura por habitante y día, los niveles de reciclaje apenas superan el 30 % frente al 50 % que reclama la Unión Europea para 2020.

"Son cifras que no son malas pero que no son las deseables", ha reconocido el edil, que ha destacado la "baja utilización" del contenedor de recogida orgánica y la "mala calidad" del compost resultante, así como la abundancia en los contenedores amarillos de material que no se puede reciclar en ellos.

"Llevamos muchos años estabilizados en la separación de residuos", ha añadido Alonso antes de anunciar que su departamento realizará nuevos planes para mejorar estos resultados y equipararlos a la buena marcha del resto de las variables analizadas.

La sustitución de farolas por otras con tecnología LED también ha permitido reducir el consumo "en más de un millón de kilovatios/hora anuales", ha destacado Prusilla, "y se siguen construyendo infraestructuras verdes", además de reacondicionar 14,5 hectáreas de zona degradada y alcanzarse las 96 hectáreas de producción ecológica.

En cuanto al consumo de agua, respecto al año anterior se ha logrado ahorrar 16 litros por persona y día, lo que deja un consumo global diario de 200 litros por persona, de los cuales 106 son de uso doméstico.

Otro de los retos es la corrección de aquellas zonas en las que se detecta población expuesta a niveles de ruidos superiores a los deseables, por lo que el Ayuntamiento diseñará este año un nuevo mapa del ruido de Vitoria.

El 22,1 % de las viviendas de Vitoria cuenta ya con certificado de eficiencia energética, obligatorio para las ventas o alquileres, aunque de ellas sólo el 2,8 obtienen una eficiencia de categoría A, B o C.