en la pantalla del teléfono, un número desconocido. Y al otro lado del aparato, la voz de un supuesto familiar en apuros, retenido en un aeropuerto por un problema con la documentación, y que necesita urgentemente dinero para proseguir su viaje. Son los ingredientes de un nuevo timo telefónico que esta semana han intentado colar, al menos, a una mujer mayor de Vitoria, aunque por fortuna sin éxito.

El teléfono del domicilio de la víctima elegida, de 95 años, sonó sobre las 9.30 horas del jueves. Al descolgar, el estafador hizo creer a la mujer que era un sobrino suyo atrapado en Barajas tras un viaje a Cancún que necesitaba 987 euros para salir de allí e, incluso, visitarla días después. Y le dio un número de cuenta. Pero ella sospechó y llamó a su hijo José Mari, que contactó inmediatamente con su primo real, que se encontraba “tranquilamente” en casa. Con “un poco de susto” en el cuerpo, tal y como relató ayer a este periódico, José Mari puso el caso en conocimiento de la Policía Local, que no ha recibido más denuncias de este tipo. Denuncias que, por ejemplo, sí se han recogido por esta misma modalidad de estafa en ciudades como Pamplona.