elvillar - El dolmen de El Encinal, en Elvillar, se encuentra a punto de derrumbarse y presenta un mal aspecto lleno de puntales de hierro para sujetarlo. Cuenta hasta con un encofrado de madera para que no se hunda el acceso.

Este dolmen se encuentra a mano derecha de la carretera que une Elvillar con Kripan a través de una pista de tierra en muy buen estado de cerca de 800 metros de longitud y en un espacio insólito, ya que varias encinas han salido de entre sus piedras ofreciendo un singular aspecto.

El dolmen fue descubierto por Domingo Fernández Medrano en junio de 1943 y excavado por él mismo en 1951. Es el único en el que no se han encontrado restos humanos por lo que presenta el mayor problema para datar su época. En cualquier caso, la estructura está conformada por seis losas que cierran el recinto poligonal de la cámara y cuatro que forman el corredor. Le falta la cubierta, razón por la que se achaca la inexistencia de restos óseos en su interior.

Este dolmen fue estudiado en el año 2012 por el equipo que dirigió el catedrático de la Universidad del País Vasco Javier Fernández Eraso y el también profesor José Antonio Mujika Alustiza como parte de un ambicioso plan de actuaciones emprendido por la Diputación Foral de Álava y la Universidad del País Vasco por medio de la Fundación Euskoiker. El citado proyecto tiene como fin último la puesta en valor de las ocho arquitecturas funerarias de esta zona, donde se realizaron una serie de 42 dataciones radiocarbónicas que encuadran con precisión el fenómeno funerario en este territorio durante la Prehistoria reciente.

Sin embargo, en la actualidad, el interior del dolmen se encuentra apuntalado de todas las formas posibles, ya que debido seguramente a la presión de las raíces de las encinas las grandes losas se están venciendo hacia el interior y están comprometiendo el conjunto megalítico. En el Ayuntamiento desconocen quién colocó los puntales, aunque consideran que debió ser la Diputación Foral, ya que les corresponde a ellos el mantenimiento del patrimonio histórico, pero por el aspecto que presenta el material de sujeción ese problema se debió detectar hace ya mucho tiempo y todavía no se ha solucionado. Parece ser que en la institución foral tienen intenciones de actuar para evitar el hundimiento, pero hasta la fecha no ha sido posible confirmar cuando lo harán. - Pablo José Pérez / Foto: P.J.P.