burgos - La alcaldesa de Condado de Trebiño, Elena Ramírez, pidió ayer al delegado de la Junta de Castilla y León en Burgos, Baudilio Fernández, que el gobierno regional se integre en el convenio que están a punto de firmar las diputaciones de Burgos y Álava.

Ramírez, del grupo Ciudadanos del Condado, explica que, aunque se trata de “un convenio transitorio, hasta que se resuelva definitivamente la situación de Trebiño”, se queda corto sin la Junta de Castilla y León, titular de competencias fundamentales para dar servicios adecuados al enclave burgalés en Álava.

Entre ellos, cita la alcaldesa la educación, “porque casi todos los niños estudian en euskera”; la atención sanitaria, “para que no se den situaciones como la actual, en la que cuando se requiere atención médica que no se ofrece en Vitoria, los treviñeses no son derivados a otro hospital vasco, sino a Salamanca o Valladolid, centros hospitalarios mucho más alejados de Trebiño. Otro ejemplo al que se refiere la regidora de Condado es la vialidad invernal, porque las dos principales carreteras del enclave dependen de la Junta de Castilla y León.

La alcaldesa ha empezado con el delegado territorial de la Junta de Castilla y León una ronda de contactos con representantes institucionales y de partidos políticos previa a la posibilidad de retomar la iniciativa de presentar una propuesta de Ley Orgánica en el Congreso para que sea esta Cámara la que cambie los límites territoriales y Treviño pase a formar parte de Álava.

En declaraciones antes de entrar a la reunión con la alcaldesa, el delegado defendió una vez más la postura de la Junta, contraria a la segregación de Trebiño y su inclusión en Álava.

Sin embargo, Ramírez cree que el cambio de equilibrio de fuerzas en el Congreso de los diputados les abre una posibilidad de seguir esta vía, que fracasó en la pasada legislatura. Sostiene que el 90% de los habitantes del enclave aspira a pertenecer a Álava por lazos familiares, sociales y económicos, porque muchos tienen su puesto de trabajo, su familia o el lugar de estudio de sus hijos en territorio alavés.

En este sentido, Trebiño no quiere esperar. El Ayuntamiento de Condado ya ha dado el primer paso en un largo camino que, si todo sigue su curso, debería volver a situar al enclave alavés en el mismo escenario del que salió escaldado en 2014: el Congreso de los Diputados. Por entonces, las formaciones políticas con representación en las Cortes Generales tumbaron su aspiración de salirse de Burgos para integrarse en Álava. - Efe/DNA

El convenio. Acuerdo-marco de colaboración entre la Diputación de Álava y la de Burgos sobre Trebiño, con el visto bueno de los municipios treviñeses de Condado y Lapuebla de Arganzón, para desarrollar trece convenios, uno por cada servicio. El texto dice así: “El presente acuerdo-marco tiene una duración de dos años a contar desde el día de su firma, y podrá ser prorrogado por acuerdo expreso de las partes, por dos años. Los acuerdos de prórroga deberán adoptarse con una antelación de tres meses a la finalización de la vigencia del acuerdo-marco”. La duración máxima será de cuatros años, incluidas las prórrogas. En todo caso tendrá carácter transitorio y finalizará por denuncia expresa de cualquiera de las partes, comunicada a la otra con tres meses de antelación.

La Junta. Hay necesidades de Trebiño que competen al gobierno de Castilla, como el mantenimiento de carreteras clave como el puerto de Vitoria y Zaldiaran. También materias relacionadas con los servicios sociales o la educación. De ahí que el Ayuntamiento de Condado solicite más implicación por parte de la Juntas de Castilla y León para la prestación de servicios.