vitoria - Los desbarajustes urbanísticos provocados por la extinta Agencia de Revitalización Integral del casco Histórico, Arich, siguen goteando sobre la oficina del Síndico de Vitoria, Martin Gartziandia, quien trata de contener las fugas a través de recomendaciones dirigidas al Ayuntamiento. La última de ellas, publicada ayer, está relacionada con la expropiación de un inmueble del Casco Viejo cuya situación legal ha quedado en tierra de nadie. Tanto es así, que sus propietarios no pueden ni siquiera rehabilitarlo pero deben hacer frente a los gastos que genera.

Los coherederos de una vivienda situada en el número 127 de la calle Correría contactaron con el Síndico para explicar que hacía años se había llevado cabo una operación liderada por la Arich, con el objetivo de habilitar unos apartamentos tutelados en el inmueble tras hacerse con su propiedad vía expropiación. A fin de evitarla, los propietarios negociaron con la agencia su adquisición por importe de 74.227,96 euros. La gestión se encomendó a la empresa AYTASA, aunque cuando se cumplió el plazo marcado no recibieron noticias al respecto. Contactaron con la firma, la cual les comunicó que habían quedado al margen de la operación y que el asunto pasaba a manos del Ayuntamiento. En las oficinas municipales les indicaron que la gestión competía a la sociedad Ensanche 21, pero el asunto nunca llegaba a sus órdenes del día.

La gestión quedó suspendida por motivos económicos, las unidades de ejecución se paralizaron y todo se detuvo. Al año siguiente, ya en 2013, los propietarios solicitaron que se solucionara el problema, pero ni Ensanche 21 ni el Ayuntamiento han adoptado medida alguna ni les orientan sobre los pasos que pueden dar para desatascar el proceso.

Los propietarios denuncian que esta inactividad les genera una total indefensión, dado que el edificio está tapiado, el propietario mayoritario es el Ayuntamiento y ni siquiera pueden rehabilitarlo porque no tienen noticias de que el Ayuntamiento quiera acometer las obras necesarias. Mientras tanto, siguen pagando los impuestos y los gastos que genera el inmueble sin disponer de derecho alguno, ya que les han despojado de ellos.

Llegados a este punto, Gartziandia ha solicitado al Ayuntamiento de Vitoria que ponga en marcha cuanto antes el procedimiento expropiatorio del inmueble y que, de manera progresiva, “se lleve a término la consiguiente ejecución urbanística del resto de Unidades de Ejecución Pública Residencial contempladas en el PERI del Casco Medieval que aún restan por ejecutar, con el fin de favorecer la rehabilitación de dichos inmuebles y la reforma interior del barrio en su conjunto, tal y como pretendía dicho Plan Urbanístico”.

Gartziandia considera que no se ha prestado la debida atención a este asunto. En el documento, recuerda que los técnicos de Urbanismo informaron de que la petición de expropiación por parte de la Arich se presentó en dos ocasiones, pero que en ambas fue paralizada. Remitieron la documentación a Ensanche 21 para que tomara la decisión sobre si se tramitaba o no expediente de expropiación forzosa, pero no volvieron a tener noticias. - A. Burdain