villanueva de valdegovía - Un total de 24 comunidades de regantes de Valles Alaveses se integrarán en Tumecillo para beneficiarse del proyecto de modernización en marcha.
¿Cuál es la radiografía de la Comunidad de Regantes de Valdegovía?
-En estos momentos, lo que son propietarios que se benefician del regadío somos en torno a los 320 partícipes y cultivadores que estén trabajando las tierras habrá en esta zona alrededor de 25-30.
¿Y qué productos se trabajan?
-Los cereales, como el trigo, la cebada y la avena, las habas, patata de siembra y de consumo, algo de colza, remolacha a partir de este año, girasol y adormidera.
¿Estas producciones se comercializan vía cooperativa?
-Si, la mayoría sí, aunque hay algunos que van por libre.
¿Cuáles son las necesidades más importantes que tienen en estos momentos el conjunto de los regantes de Valdegovía?
-Por una parte encontrar cultivos que sean alternativos para poder diversificar un poco nuestros cultivos y encontrar algunos que tengan más aporte económico. Estamos un poco estancados con los cereales y se ha abandonado un poco lo del tardío.
¿La patata sigue estando en entredicho por la competencia de la que llega de otros países?
-Sí, pero también depende un poco de la apuesta que se haga. Hay gente que está apostando por la patata de siembra y su demanda es más grande que la de consumo. Hay otros que hacemos patata de label con UDAPA, por lo que estamos diferenciados por otra categoría, por otro producto distinto. Y hay otros que van por libre y hay años que aciertan con los mercados y otros se estrella. Y así es como estamos funcionando.
Las actividades de promoción, como la Feria de la Patata, ¿ayudan a su comercialización, a fijar una renta para los agricultores?
-Son días que se aprovechan más para el turismo en el valle, que se potencia más el que se conozca la zona en plan turismo que lo que es en si la renta agraria, porque no se mueven unos volúmenes -esos días- que puedas decir que te va a solucionar el mes, ni mucho menos. De todas formas hay gente que sí que lo aprecia y todos los años es fiel y participa.
¿Qué importancia tiene para los agricultores el proyecto de regadío de Valles Alaveses?
-Como propietarios de las parcelas es un tema importante porque al final se revalorizan los terrenos, aunque no sé si tanto como la gente puede llegar a pensar. Y como agricultores que somos es muy importante, porque si no nuestros cultivos, que necesitan agua, que cada día van a ser más, no podríamos competir, no podríamos sacar producciones decentes. Iríamos casi a un abandono del agro.
¿Qué otras ventajas tiene el plan?
-El proyecto es importante, porque es un regadío por su propio peso. Se acumula agua en el invierno con lo que podremos regar sin bombeos, sin gastos por ese concepto. Y además hay un beneficio medioambiental, porque se evita retraer agua de los ríos en verano y se reduce la huella de carbono porque al evitar el bombeo reducimos toneladas de CO2.
Por lo que se ha venido manifestando a lo largo de los últimos tiempos apenas hay discrepancias en cuanto al regadío, pero si sobre la existencia de un embalse?
-Los embalses y las balsas son necesarias para acumular agua en invierno y disponer de agua en verano que es cuando no hay. La acumulación de agua es importante.
¿Cuáles son las necesidades que tiene la comarca y que se plantearía en una mesa de negociación?
-La dinámica que se está siguiendo y los proyectos que están en marcha son los objetivos viables son las cuestiones necesarias. Lo que necesitamos es que todos vayamos de la mano. La primera fase que estamos ejecutando es una fase de regadío para unas 2.000 hectáreas, aunque el regadío de Valles Alaveses abarca unas 8.000. Por eso lo que pedimos es continuidad en la obra para poder poner el resto de zonas en producción con regadío.
Toda esta zona vive gracias a la presencia de agricultores, porque en caso contrario estos pueblos quedarían abandonados?
-Pues sí. Seguramente. Aunque se va reduciendo mucho el número de agricultores, los que quedan cada vez son más potentes y aun así hay que seguir apostando por cultivos de regadío porque son más viables que los de secano. En los de secano, en los tiempos en los que estamos, los precios son los que son, muy ajustados, y los gastos que tiene el agricultor en esos aspectos son bestiales, y al final la rentabilidad viene dada por que tiene que mover muchas hectáreas pero solo para cambiar de sitio el dinero, porque tiene que invertir en maquinaria para mover más producción y eso es la pescadilla que se mueve la cola. Pero hay cultivos que, regando, tiene más trabajo de a pie porque el agricultor se tiene que bajar del tractor, no solo subido a él como parece que nos estamos acostumbrando últimamente. Eso requiere otro tipo de esfuerzos pero también tiene otro tipo de rendimientos.
En el debate sobre este proyecto se ha llegado a decir que la Comunidad de Regantes no existía?
-La Comunidad de Regantes siempre ha existido, hace más de 20 años? Antes de hacerse este planteamiento de regadío había otras comunidades más pequeñitas, que utilizaban el río. Pero siempre han ido de la mano. Después constituyeron una comunidad mucho mayor. Así que siempre han estado ahí. No entiendo esos comentarios.
En un baremo de 0 a 10, ¿cuál sería la puntuación que da la comunidad de regantes al proyecto?
-Un diez, sin duda.