Pocas decisiones se toman en la vida sabiendo que es la acertada. La de dejar de fumar es una de las que uno no se arrepiente . Lo que desconocía Amaia Ochoa (Vitoria, 1965) es que se lo iba a pasar tan bien haciéndolo. “Ya había intentando antes dejar el tabaco, como por ejemplo, con pastillas, pero me convertía en una borde porque me daban ansiedad. Esta vez no sólo lo he conseguido sino que ha sido la vez que mejor me lo he pasado. He reflexionado mientras dibujaba y me he relajado”, agrega esta gasteiztarra. La solución, además, la tenía frente a sus ojos o, mejor dicho, sobre la mesa de su oficina, gracias a los bolígrafos, rotuladores y lapiceros que utiliza a diario como ilustradora y diseñadora gráfica que es.

Su técnica para dejar de fumar consiste en la arte terapia a través del libro Deja de fumar dibujando, que ella misma ha autoeditado. Se trata de un novedoso método que propone dejar el tabaco en 21 días mientras su lector va haciendo las ilustraciones que quiera y hasta fumando a la vez, si le apetece. Aunque, eso sí, la idea es ir reduciendo los cigarros con el paso de los días, siguiendo las instrucciones que vienen en el libro. “No hace falta dibujar bien porque hasta se puede garabatear”, explica Ochoa, respecto a este volumen de 80 páginas (30 de ellas en blanco) que viene ilustrado con los propios dibujos, como nudos o flores, que hizo a mano esta diseñadora mientras intentaba alejar el pitillo de su vida.

Ochoa asegura que a ella, “una fumadora hasta la muerte” le ha funcionado. En concreto, hace un año que no volvió a encenderse un cigarrillo porque ya se lo había propuesto del todo. Era la época en la que participaba en unos talleres en Vitoria -El cofre del tesoro, que impartían Ángel, de Ilustrapados, y el terapeuta Dictino García-. “Mirando el cuaderno de bocetos que realicé en esos talleres pensé que si a mí me ha ayudado, y eso que llevaba fumando desde los 18 años, sería bonito compartir esta idea con otros que quisieran también dejar de fumar”.

Y así nació este libro de pequeño tamaño concebido así para llevarlo en el bolsillo y sacarlo en cuanto aparezca el mono de la nicotina. “Me han dicho que este método de deshabituación tabáquica se basa en Psicología en la interrupción del módulo de pensamiento, que básicamente significa que cuando aparezcan las ganas por fumar, que realmente el deseo hay que aclarar que dura tres minutos, hay que pensar en otra cosa”, precisa.

Los que ya lo han leído le han dado la enhorabuena. Tal es el caso del psicólogo de la Asociación contra el cáncer de Álava, Luis Amurrio. O personal de Osakidetza, desde donde le ha propuesto en mayo dar charlas sobre dejar de fumar siguiendo su libro. “Para mí es alentador”, dice orgullosa Ochoa.

en euskera y chino Gracias a la tarjeta con el número de su teléfono que Ochoa incluye en todos sus libros, también tiene contacto con sus lectores a través de Whatsapp. “Javier, por ejemplo, me dice que le relaja mucho, que le ayuda a pensar y me envía fotos de sus dibujos”. Y luego están los de Karmele: “Se nota que los trazos de las primeras páginas eran más fuertes, llenos de ansiedad, por empezar a dejar de fumar. Los de ahora son suaves”. Parte de los beneficios obtenidos con la venta de este libro, traducido ya a euskera y chino, ayudarán, además, a dos proyectos: “A la investigación contra el cáncer y a unos caballos abandonados en Málaga”.

Dejar de fumar dibujando ya tiene una segunda parte, que incluirá dibujos y frases de los que lo han logrado con el primer volumen.

El Libro. ‘Deja de fumar dibujando’ incluye recomendaciones para abandonar el tabaco en 21 días mientras se reduce la cantidad de cigarrillos. La idea es dibujar cuando aparezca el mono por la nicotina. Por eso es un libro de bolsillo.

Dónde encontrarlo. Vale 11 euros y se puede encontrar en cuatro librerías de Vitoria. Se trata de Jakintza, Mara-Mara, Zuloa e Izaga liburudenda.

Segunda parte. Habrá una segunda parte con frases y dibujos de los que dejaron de fumar con el primer libro.