Vitoria. El concejal de Medio Ambiente, Iñaki Prusilla, ha anunciado hoy esta medida y ha asegurado que el Ayuntamiento usará "todos los medios que el contrato y la justicia permitan para revertir esta situación".

"Estos despidos no solucionan nada y ponen en una situación delicada a la ciudad", ha dicho el edil, que en la última semana se ha reunido tanto con la empresa como con los trabajadores, al tiempo que ha advertido de que el Ayuntamiento no pagará por "servicios no prestados".

En la actual legislatura el Gobierno municipal ha abierto siete expedientes a esta UTE, lo que evidencia -según recalca en una nota- "el control exhaustivo y serio que realiza con el objetivo último de que la limpieza de las calles Vitoria sea mejor".

El equipo de Gobierno presidido por Gorka Urtaran (PNV) ha cuantificado en más de un millón de euros los servicios no prestados por esta contrata y ha avisado de que "descontará" esta cantidad de los más de 22 millones que abona al año por la limpieza de la ciudad.

Para elaborar estos cálculos el Ayuntamiento utiliza "todos los mecanismos de control" con los que cuenta como "inspecciones a pie de calle, la huella digital, el arco electromagnético, así como los GPS instalados en los vehículos y operarios que permiten monitorizar las rutas realizadas a tiempo real".

El consistorio ha recordado que en el anterior contrato de limpieza se pagaba una cantidad fija "saliesen o no las máquinas a la calle".

Sobre este asunto también se ha pronunciado hoy EH Bildu, que ha pedido al gabinete de Urtaran que exija a la UTE de limpieza la readmisión de los ocho despedidos y que, en caso contrario, ponga a disposición de esos trabajadores los servicios jurídicos municipales.

La coalición abertzale ha criticado además que los responsables de FCC se hayan negado a comparecer hoy en la comisión municipal de Medio Ambiente para aclarar estos despidos.