- La residencia foral de personas mayores San Antón de Armuru en Amurrio va a contar con una mejora en el servicio a comienzos del año próximo. Y es que en el transcurso de las obras de reforma, efectuadas por la Diputación alavesa entre los meses de diciembre y mayo con un coste de 278.000 euros, se verificó la posibilidad de adaptar el espacio destinado hasta entonces a una plaza residencial y poner en marcha un servicio de rehabilitación en el centro, que carecía de dicho equipamiento.
En concreto, la nueva prestación se pondrá en marcha en el mes de enero y será atendida por una fisioterapeuta y la auxiliar del servicio de rehabilitación de la residencia de mayores del vecino Llodio. Este servicio se prestará a diario, por lo que se espera que el número de personas residentes que accedan a rehabilitación puedan aumentar, ya que “se evitarán los traslados que tenían que realizar periódicamente a la residencia de Llodio para recibir estos cuidados”, según explicaron ayer el diputado general de Álava, Ramiro González, y la aún diputada foral de Servicios Sociales, Beatriz Artolazabal, que acudieron a Amurrio para conocer de primera mano el resultado de una reforma, calificada de “urgente” debido a que se tenían que solventar las carencias detectadas en materia de seguridad en un centro cuya construcción data de 1990.
En concreto, la obra ha dotado a la residencia de Amurrio de una escalera de evacuación exterior y se ha realizado una sectorización de incendios de las dos plantas. Se han reformado los accesos a las habitaciones, corregido las pendientes para el agua en el suelo de los baños de las habitaciones, cambiado la posición de los lavabos, y se ha mejorado la accesibilidad en las habitaciones con cambios en la posición de los cabeceros, junto a arreglos de instalaciones de electricidad, pintura, fontanería, incendios y sustitución de los suelos. En la planta baja, además, se han colocado puertas cortafuegos a la cocina, lavandería y vestuarios. - A. Oiarzabal / Foto: A.O.