gasteiz - Euskadi está de moda. Anuncios, datos, imágenes, encuestas, informes, redes sociales... Las instituciones nos bombardean a menudo con esta idea. Al igual que en el resto de Euskadi, el turismo en Vitoria también se encuentra en un momento de crecimiento y consolidación. El sector se ha desarrollado en los últimos años, principalmente desde la designación de Gasteiz como Green Capital 2012. A ello se une el auge del enoturismo y del boom que vive Rioja Alavesa ante el interés que despiertan sus bodegas. Consecuencia de todo ello, la actividad turística supone ya para la economía alavesa un 5,2% del PIB, en general, si bien, sigue sin alcanzar los niveles de Bizkaia y Gipuzkoa. Tal es así, que cada turista que llega a Vitoria se deja de media al día 80,5 euros, una cifra inferior a la de los turistas que aterrizan en Bilbao (97,5) y Donostia (87). El 33% de esa cuantía se la gastan en bares y restaurantes y sólo el 9% en compras, ya que menos de la mitad de los visitantes confiesa que se ha ido de compras por la capital alavesa (48,6%), un porcentaje de nuevo inferior al del resto de zonas turísticas de Euskadi.
En conclusión, el turismo en Gasteiz tiene un peso sostenido, aunque limitado en la economía. No obstante, por esta misma razón, otros lo aplauden como turismo responsable y sostenible. En este sentido, dos activos destacan en la oferta turística de la ciudad: el valor histórico-patrimonial de la Catedral de Santa María o la muralla, y el valor paisajístico-natural al que los turistas ponen una calificación de “muy buena”, y cuyo máximo exponente es el Anillo Verde. Pero no sólo los visitantes ponen en valor la naturaleza, el verde de Gasteiz, sino que Vitoria también es una ciudad sostenible para los vitorianos.Son las conclusiones que se desprenden del estudio sobre el turismo responsable elaborado por el Ayuntamiento en base a la recogida de información y opiniones tanto de turistas como de habitantes de la ciudad. Un informe al que ha tenido acceso este periódico y que el gobierno de Gorka Urtaran presentará el próximo martes a la oposición en la comisión de Promoción Económica.
De la encuesta realizada a los propios gasteiztarras se desprende que Vitoria es una ciudad sostenible y bien valorada de la que destacan, por orden de mayor a menor: la calidad de vida, del aire, el cuidado de su patrimonio cultural, la accesibilidad, los servicios públicos, la solidaridad y tolerancia; el cuidado de su entorno natural, y en octavo y último lugar, la limpieza. Sobre la opinión que tienen del turismo y de su influencia en la ciudad, los encuestados piensan que es beneficioso porque: crea puestos de trabajo, ayuda a conservar el patrimonio cultural, también a mejorar los servicios de la ciudad y se organizan más actividades de cara a los visitantes. Sin embargo, desconocen qué medidas toma el Ayuntamiento para atraer turismo a la capital alavesa y no han oído hablar del concepto de turismo sostenible en el que está volcada Gasteiz.
Por su parte, de las opiniones vertidas por los turistas que nos visitaron en verano se desprende que el visitante que recala en Vitoria tiene mayormente entre 35 y 64 años, procede en su mayoría de otras comunidades autónomas del Estado, sobre todo de Cataluña, ya que sólo el 8% viene de un país extranjero, fundamentalmente de Francia. El motivo de la visita es hacer turismo, pero no sólo en Gasteiz, ya que combina la capital alavesa con otros destinos cercanos. Su estancia media en Gasteiz es de dos días y suele quedarse en el centro para conocer la Plaza de la Virgen Blanca, la Plaza Nueva, la Catedral de Santa Maria, la Catedral Nueva y el parque de La Florida sin hacer demasiado uso de la oficina de turismo o de la información que sobre la ciudad se ofrece en la página web municipal. Además, valora la oferta gastronómica, cultural y natural de la ciudad por delante de la oferta de ocio. La imagen positiva que se llevan después de su visita es la de una ciudad “bonita, agradable, histórica o señorial”. La imagen negativa es la de una ciudad “fría y complicada para conducir, porque es como un pueblo o tiene muchas cuestas”. A pesar de ello, volverían y recomendarían su visita a otras personas. Y eso que, cada vez son más quienes ya conocían Vitoria antes de venir. También el porcentaje de turistas que se queda a pernoctar.
Desde este año, el servicio municipal de turismo se acoge a la marca BRT -no la de los autobuses exprés-, sino la de Biosphere Responsable Tourism, la marca que reconoce las certificaciones que cumplen con los requisitos del sistema de turismo sostenible y responsable al que se suma Vitoria.
Los vitorianos opinan que... Vitoria es una ciudad sostenible, y valoran, de más a menos: la calidad de vida, del aire, el cuidado patrimonio cultural, la accesibilidad, los servicios públicos, la solidaridad y tolerancia; el entorno natural, y en octavo y último lugar, la limpieza.
Los turistas opinan que... La imagen positiva que se llevan después de su visita es la de una ciudad bonita, agradable, histórica o señorial. La imagen negativa es la de una ciudad fría y complicada para conducir, porque es como un pueblo o tiene muchas cuestas.