vitoria - La corporación municipal se ventiló en cinco horas el debate en comisión de las ordenanzas fiscales de 2017. Tiempo suficiente para alcanzar acuerdos importantes y plurales, en algunos casos sobre las propuestas iniciales del equipo de gobierno y en otros con cambios sustanciales introducidos desde la izquierda. El año que viene habrá un incremento del 10% en el impuesto de vehículos y bonificaciones exclusivamente para los más limpios. El ICIO se congelará e incorporará descuentos de hasta el 85% en rehabilitaciones. La plusvalía descenderá una media del 35%. La tasa de basuras subirá desde un 3% (para viviendas y pymes) hasta un 15% (bancos e iglesias), con el compromiso de la ciudadanía de duplicar la ahora exigua tasa de reciclaje de Vitoria para conseguir que Ecoembes abone al Ayuntamiento un millón de euros más. Las licencias de apertura se mantendrán. Las escuelas infantiles, además de mantener las tarifas vigentes, incluirán la gratuidad en el tramo de 0 a 2 años para familias en situación de vulnerabilidad económica. Y ya.

El gobierno no logró sacar adelante ninguna de sus propuestas, con subidas de entre el 10% y el 15%, para el resto de tasas y precios públicos. Eso significa que, a priori, se mantienen las tarifas de este año para abastecimiento de agua, la OTA, el uso de instalaciones deportivas, los equipamientos congresuales y culturales, la escuela de música, la academia de folklore, el conservatorio de danza, la concesión de licencias urbanísticas, la grúa, el vertido de aguas no domésticas, el vertido en plantas de tratamiento de residuos, los veladores y vados, la expedición de la TMC, los recursos orientados a las personas mayores, el uso de salas de Jundiz y la realización de bodas civiles. Advirtió la edil de Hacienda, Itziar Gonzalo, que desde 2014 no ha habido actualizaciones y que es necesario corregir las diferencias entre lo que el Consistorio se gasta en estos servicios y lo que la ciudadanía paga por ellos. Pero no le funcionó. Y eso que en la oposición sólo los populares defienden la congelación. Si se fue sin acuerdos en esos puntos fue porque los demás grupos quieren presionarle para tratar de sacar adelante en el Pleno de mañana algunas iniciativas que en este primer round fueron rechazadas y (o) suavizar las tarifas de Tuvisa, cuestión esta última que va a ser tratada a puerta cerrada en un consejo de la sociedad municipal previsto para hoy.

Es lo que en la política se llama vulgarmente intercambio de cromos. Y el más deseado, por lo que supone en recaudación y en posicionamiento ideológico, se llama IAE. De todos los impuestos municipales fue el único que ayer se saldó sin pactos. Por algo todos los grupos coincidieron en que era “el debate más importante”. No obstante, puede que para cuando llegue el Pleno se haya rubricado uno en los despachos. EH Bildu es con sus seis concejales, y por autodescarte de los populares, el grupo más decisivo. Y quiere aprovechar esa condición para dinamitar el acuerdo que el pasado 29 de octubre sellaron el PNV, PSE y PP con la patronal alavesa para suavizar la subida que el propio Maroto había forzado en la recta final de su mandato. Ese día, grabado a fuego por una fotografía que al resto de partidos sigue avergonzando, se aprobó un coeficiente de 1,1458 para este año y del 1,71, más aplicación del incremento del conjunto de tributos, para 2017.

Lo que propone EH Bildu es, en lo que según dijo ayer ha sido un esfuerzo por intentar acercar posturas, un coeficiente de 1,95 en 2017, de 2,01 en 2018 y de 2,20 en 2019. Así, en tres años, se alcanzaría al fin el tope de la norma foral y Vitoria quedaría equiparada con las ciudades del entorno. “Nosotros nos hemos movido 25 centésimas”, advirtió el concejal Antxon Belakortu en referencia a la primera iniciativa que presentaron semanas antes, “y lo que pedimos a los demás -al gobierno- es que se muevan 24”. Se trata, dijo el edil, de una cuestión de justicia. Ahora mismo, por cada euro que pagan las grandes empresas, la ciudadanía pone tres del IBI. “Y esto es lo que ha bloqueado una serie de cuestiones, pero si las empresas pagan lo que tienen que pagar podremos hablar de otros precios públicos”, apuntilló el concejal de la coalición abertzale, destapando las cartas.

EH Bildu consiguió el apoyo de Irabazi y la abstención de Podemos, que había presentado una propuesta más ambiciosa que arrancaba en 2017 con un coeficiente de 2,04 para alcanzar en 2019 la misma cifra, pero no convenció al equipo de gobierno. Gonzalo recordó que el acuerdo del año pasado se alcanzó para “reconducir la situación y evitar un contencioso tras el incremento tan desproporcionado que hubo antes”. Y el PSE, socio de los nacionalistas, advirtió por boca de Carlos Zapatero que “un pacto está para cumplirse y obliga a todas las partes”. Por eso, ambas formaciones defendieron un coeficiente del 1,88. Les sale de sumar al 1,71 del próximo ejercicio el incremento medio aplicado al conjunto de tributos, cifrado por ellos en un 10%. Y así fue como estalló el único consenso que había existido hasta ahora con el IAE.

El PP tiene claro que el coeficiente que hay que aprobar es 1,71. “No hemos visto ninguna media ponderada o sin ponderar, ni un solo cálculo, que explique el 10%. Nosotros estamos por cumplir el acuerdo. Y el acuerdo dice 1,71”, subrayó el edil Manu Uriarte. Zapatero les sugirió a los populares que podían estar cometiendo un fraude de ley y Gonzalo no dudó en mostrar su decepción. “A la primera ocasión que ha tenido, este partido se retira de un acuerdo fundamental para garantizar el equilibro económico del Ayuntamiento en un momento muy delicado. Es una absoluta irresponsabilidad romper los compromisos así, por un simple afán de decir que no a todo, incluso a lo que ellos mismos firmaron. El PP, simplemente por intereses partidistas, se quiere bajar del carro”, reprochó.

El debate sobre la subida del IAE acabó con tres bloques enfrentados entre sí, pero si finalmente se desenquista podría cambiar otra cuestión en el impuesto realmente trascendental. Podemos e Irabazi presentaron sendas enmiendas para conseguir que el IAE, que en este momento se aplica a las empresas que facturan de 2 millones de euros para arriba, se liquide a partir de un millón. Y ambas formaciones lograron que su propuesta saliera adelante gracias al respaldo de EH Bildu, que en legislaturas pasadas incorporó de forma habitual esta discusión, y el visto bueno del equipo de gobierno. Todos los grupos, salvo el PP, que votó en contra, entienden que ha llegado la hora de fijar ese volumen de operaciones para equiparar Vitoria con el conjunto del Estado, más aún dada la delicada situación de las arcas públicas. Ahora, por tanto, sólo hay que esperar a que la ordenanza en bloque salga adelante y se modifique la norma foral para que el cambio se haga realidad.

10%

El impuesto de vehículos sube un 10% (propuesta del gobierno). Se aplican bonificaciones: del 90% los vehículos eléctricos y del 50% los vehículos denominados ECO (enmienda transada de Podemos e Irabazi). Se suprimen las demás. En el caso de las familias numerosas, estas bonificaciones se incrementan un 10% adicional (propuesta del PP). Los vehículos históricos tendrán una rebaja menor, del 50% (Podemos).

0 y...

El ICIO se congela. Además, se ha establecido una deducción del 85% para obras que engloben rehabilitación energética y accesibilidad (enmienda transada de Irabazi y Podemos). Hay bonificaciones del 80% para obras e instalaciones que obtengan etiqueta A y del 50% si es de clase B (enmienda de Irabazi). Se incorpora otra del 80% para aquellas obras destinadas a habilitar puntos de recarga para vehículos eléctricos en garajes de viviendas (Irabazi).

-35%

La plusvalía se fija a partir de una propuesta del gobierno para minimizar el impacto del descenso en la recaudación por este impuesto derivada de la actualización a la baja de los valores catastrales que entra en vigor el próximo año. El Ayuntamiento dejará de ingresar aproximadamente 6.300.000 euros. Supone una bajada media del 35%.

3% y...

En la tasa de basuras se aplica el plan de EH Bildu. Por un lado, un incremento del 3% para viviendas y locales de tamaño pequeño o medio en las áreas de comercio, alimentación, hostelería, clínicas, industrias y restaurantes; del 8% a todos los establecimientos de tamaño grande; y del 15% para bancos e iglesias. Por otro, se firma un pacto por el reciclaje con campañas de concienciación e información para duplicar la tasa actual, mejorar la separación de residuos y conseguir ingresar de Ecoembes un millón más.

0 y...

Se mantienen las tarifas de las escuelas infantiles, con gratuidad en el tramo de 0 a 2 años de familias vulnerables.

Por miembros y renta. Podemos introdujo en el debate de los tributos propuestas de nuevas tablas de bonificaciones según número de miembros y tramos de renta para familias numerosas, con el objetivo de avanzar hacia la progresividad fiscal. El gobierno y Bildu coincidieron en que es un debate interesante pero votaron en contra para abordarlo en la ponencia de fiscalidad, estudiando con calma los números. Irabazi se abstuvo y, curiosamente, el PP apoyó a la formación morada.

La concejal de Hacienda replicó a EH Bildu que el acuerdo PNV-PP-PSE del IAE se firmó para evitar nuevos recursos de la patronal después de que la justicia le hubiera dado la razón por “la anterior subida desproporcionada”. Al PP le aseguró que hay que aplicar un 1,88.

El PSE, socio de gobierno, insinuó al PP “con todo mi cariño y todo mi respeto” que su propuesta de 1,77 puede ser “un fraude de ley”.

El PP se aferró al acuerdo firmado con PNV y PSE el año pasado y no reconoció que se pueda sumar al coeficiente pactado el incremento medio del conjunto de los tributos.

EH Bildu insistió en subir más el IAE, empezando en 2017 con un coeficiente de 2,04 para llegar en 2019 al tope, 2,20, y advirtió de que en función de ese impuesto discurriría su postura con otros precios públicos y las tarifas de Tuvisa.

Podemos animó a alcanzar para el Pleno de mañana un acuerdo de subida del IAE, si no el suyo el de EH Bildu, menos ambicioso. De esa forma, también saldrá adelante su propuesta y la de Irabazi de aplicar el impuesto a partir de una facturación de un millón de euros.

Irabazi se postuló a favor de la subida del IAE y recordó que en los territorios limítrofes este impuesto se aplica a partir de un volumen de operaciones de un millón de euros, en vez de los dos de Vitoria.