Oion - La piscina climatizada de Oion ya no existe. El gran vaso que albergó la instalación ha sido cegado y sobre él se ha instalado un enorme suelo de caucho dejando un salón de unos 600 metros cuadrados listo para acoger otras actividades. Con ello se ha hecho realidad una reflexión realizada tanto por el alcalde, Eduardo Terroba, como por el resto de concejales de PNV, EH Bildu y PSE-EE a la vista del escaso uso de la infraestructura que hacían los vecinos y de los costes de mantenimiento derivados de la instalación.
Antes de dar el paso, el 10 de noviembre del año pasado, el alcalde, Eduardo Terroba, acompañado por otros miembros de la corporación, acudió a Nanclares de la Oca para reunirse con el primer edil de aquella localidad, el socialista Javier Martínez. Ese municipio es de similares características a Oion y cuenta con unas instalaciones de invierno que se construyeron en la misma época que las que existen en la villa de Rioja Alavesa. Aquéllas disponen de cafetería, spa, piscina de invierno y gimnasio, además de contar también dentro del mismo recinto con las piletas de verano.
El alcalde de Nanclares les informó que el mayor gasto derivado de la instalación obedece al mantenimiento y al consumo energético del vaso. De hecho, junto con el resto del complejo de invierno supone una aportación municipal de 110.000 euros anuales. Esas instalaciones cuentan con un número aproximado de 700 abonados que, además, “demandan más salas donde poder realizar mayor número de actividades físicas”. Martínez también relató que “si a día de hoy se planteara la construcción de la piscina cubierta no la haría, ya que el uso del vaso es mínimo y el coste de mantenimiento y consumo muy altos”, según explicó Terroba en su momento.
El alcalde oionés también consultó con otros municipios. Concretamente, Viana y Villamediana de Iregua. “Sus conclusiones eran coincidentes”. Y es que los costes para la corporación de Oion eran insoportables. Durante 2015 la estimación del gasto de energía eléctrica, gas, consumo de agua o teléfono, entre otros conceptos, fue de 147.223,97 euros y el contrato de gestión del servicio era de 75.545,46 euros. Frente a estos gastos, la instalación contaba tan sólo con 161 abonados, que pagaban 90 euros al año para aportar un total de 14.490 euros a las arcas municipales.
Este rendimiento económico, unido a los gastos que sería necesario realizar para solucionar los problemas de filtraciones que tenía el vaso, son los que aconsejaron tomar la decisión de clausurar el vaso y reconvertir la sala en otras de usos múltiples.
Según el diseño que baraja el equipo que dirige Eduardo Terroba, la gran sala se podría dividir en tres zonas diferenciadas para distintos tipos de gimnasia, como zumba o mantenimiento, de acuerdo con lo que demandan los usuarios. De esa forma se liberaría la sala que hasta ahora se ha usado y que podría albergar más máquinas de musculación.
Obra en el frontón Aprovechando que se ha estado trabajando en la clausura de la piscina, el Ayuntamiento de Oion también ha decidido solucionar un problema que existía en las traseras del frontón, en la zona que da a las pistas de pádel. Al parecer, según Eduardo Terroba, cuando se construyó esa instalación, en vez de dejar cerrado con hormigón un talud de la trasera del frontón, tan sólo se tapó con ladrillos. La cuestión es que la humedad ha ido socavando esa zona y al final se ha tenido que retirar la construcción así como la tierra húmeda que había ido cayendo y hacer un muro de contención que sujete la ladera y no desmerezca el lugar. - Pablo José Pérez / Fotos: P.J.P.