labastida - El próximo día 30 los vecinos de la localidad alavesa de Labastida se van a encontrar con el cementerio municipal totalmente renovado, con mejores accesos y sin la inquietud de tener que pensar que los enormes árboles pueden afectar a las construcciones que alberga el recinto.
La alcaldesa de Labastida, Laura Pérez Borinaga, explica que el problema de la instalación es que tenía una amplia cantidad de árboles que habían adquirido un tamaño importante, y cuyas raíces estaban provocando que los viales se levantaran con el consiguiente peligro que el cemento agrietado y abombado podía ocasionar, como caídas a las personas que transitaran por la zona.
A este problema se añadía también que muchos de esos árboles se encontraban secos y ofrecían el peligro de las ramas, que podían caer causando daños a los panteones y tumbas o, lo que es peor, poniendo en peligro la integridad física de las personas que pudieran estar en ese momento caminando por el cementerio.
Por este motivo, en Labastida se han eliminado todos esos árboles, lo que ha provocado que, al eliminar los tocones, han permitido levantar todos los viales y accesos para eliminar barreras arquitectónicas, y reformar así los viales del cementerio para que pudieran alcanzar las debidas condiciones.
Laura Pérez reconoce que el cementerio de la localidad acumulaba ya muchos años de abandono y se encontraba en unas condiciones anticuadas e inadecuadas. Con esa perspectiva, desde el Ayuntamiento decidieron actuar para paliar los problemas que estaban surgiendo.
La obra se encuentra ya en una fase muy avanzada, y si nada se tuerce el próximo día 30 estará finalizada. La razón por la que el Consistorio de Labastida ha acometido ahora las actuaciones es aprovechar un subvención de obras menores que concedió recientemente la Diputación Foral de Álava a la localidad, además de que “consideramos que era una inversión necesaria para el municipio, para tener un cementerio con las medidas adecuadas”, sostiene la alcaldesa.
La obra estará prácticamente terminada a finales de este mes, el día 30 en principio, una fecha clave porque, en la previa del Día de todos los santos, es cuando una gran parte de los vecinos acude a rezar a sus fallecidos o a limpiar las tumbas. De cualquier forma, para esa fecha se prevé que pueda faltar algún banco o papelera, que según señalan desde la corporación municipal se procederá a colocar en días posteriores. - Pablo José Pérez / Foto: P.J.P.