Desde que DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA adelantó en exclusiva en abril que el IBI se encarecía, y mucho, para las VPO de Vitoria, ninguna institución se ha hecho responsable de esta subida de la que unos partidos se culpan a otros sin que, todavía, se haya aprobado una solución para suavizar a los contribuyentes el fuerte incremento del impuesto. Faltan trece días para el 2 de junio y, a día de hoy, lo único seguro es que el Ayuntamiento girará los recibos en la fecha prevista, confirmó ayer el alcalde: “No hay tiempo material” de dar marcha atrás, señaló Gorka Urtaran. Si a posteriori los partidos llegan a un acuerdo y se devuelve a los propietarios de inmuebles parte del impuesto previamente abonado, como también se barajó, está por ver.
El gabinete de Urtaran plantea como solución que la Diputación modifique la actual Norma Foral para que el Ayuntamiento pueda limitar a un máximo anual (10%) las posibles subidas del IBI a los vitorianos. Pero el gobierno jeltzale se ha encontrado con dificultades para sacar adelante su propuesta tanto dentro como fuera del Consistorio. De puertas adentro, porque la oposición le reclama suavizar el incremento de la contribución a las VPO este mismo 2016, y los recibos ya van camino de los buzones de los contribuyentes. Tampoco lo tiene fácil Urtaran de puertas para afuera, ya que la Diputación no quiere entrar al debate encendido en el seno del Ayuntamiento ni dar la razón o quitársela a la interpretación que de la normativa hace cada partido, y ya le ha dicho al alcalde por carta que se mantiene al margen de la polémica, que no va a interpretar la Norma Foral.
Una Norma Foral que los expertos dicen que debe entenderse en su conjunto, pero que en algunos de sus artículos deja claro que en 2016 se cobra según lo aprobado en septiembre de 2015, o sea, la subida puesto que el pasado ejercicio se aprobó la actualización de los precios de venta de VPO. En su artículo 16 recoge que “el impuesto se devenga el primer día del periodo impositivo; período impositivo que coincide con el año natural, y que “las variaciones de orden físico, económico o jurídico que se produzcan en los bienes gravados tendrán efectividad en el periodo impositivo siguiente a aquel en que tuvieren lugar. Y en el artículo 19 explica que “las facultades de gestión, liquidación, inspección y recaudación, tanto en período voluntario como por la vía de apremio, corresponden al Ayuntamiento (...)” y que “corresponde a los ayuntamientos la tramitación y liquidación de altas y bajas, exposición al público de padrones, resolución de recursos y reclamaciones, cobranza del impuesto, aplicación de exenciones y bonificaciones y actuaciones para la asistencia e información al contribuyente referidas a las materias de este impuesto”.
El alcalde también tiene en este asunto enfrente al PP, para quien, “Urtaran es el único responsable de la subida del IBI a la VPO porque está en su mano frenarla y no lo hace por recaudar 1.158.000 euros más”, manifestó ayer el concejal Manu Uriarte. “Sí que hay tiempo para echar atrás esta subida, como le venimos diciendo desde el PP, lo que no hay es voluntad política por su parte”, censura el edil.
Ambos partidos (PNV y PP) se siguen culpando de la subida de la contribución a los pisos de protección oficial, y si para los populares la culpa es de Urtaran, para los jeltzales es de Maroto. Así, el alcalde declaró ayer que fue decisión del PP la pasada legislatura solicitar la actualización del precio máximo de venta de la VPO, valor que se tiene en cuenta para cuantificar el pago del IBI: “Si el IBI de la VPO ha subido es por una decisión de Maroto”, indica Urtaran. A lo que los populares volvieron a responder que pidieron una reunión en 2012 con el Gobierno Vasco para actualizar el precio de la vivienda protegida en Gasteiz, pero que eso no es pedir una subida de los valores máximos de venta en 2016. “Si este año sube el IBI a 20.000 VPO es porque Urtaran lo ha decidido. Esos nuevos valores máximos de venta se han aprobado con una Administración del PNV en el Gobierno Vasco, una Administración del PNV en la Diputación de Álava y un alcalde del PNV en el Ayuntamiento de Vitoria”, insiste Uriarte. Así las cosas, hasta que los partidos no lleguen a un acuerdo en el Ayuntamiento, los contribuyentes propietarios de una VPO abonarán el 2 de junio el recibo del IBI con la subida del 28% incluida, lo que en algunos casos supone multiplicar por dos el impuesto.
En cuanto al otro IBI, al que en 2017 afectará a todos los inmuebles de la ciudad, y que también subirá, el Ayuntamiento solicitó a la Diputación una ampliación del plazo para marcar el tipo, esto es, el coeficiente que se utiliza para determinar a cuánto asciende la contribución urbana de cada inmueble de la ciudad, una vez actualizado el catastro. La respuesta del gobierno de Ramiro González ha llegado por carta al Consistorio y en el escrito, la institución foral da de plazo a los partidos municipales hasta el 15 de julio para que fijen el tipo a aplicar en el IBI el próximo ejercicio.