Amurrio se va a llenar este domingo de pañoletas de colores. Serán las que porten alrededor de 3.000 chavales de entre 8 y 18 años de edad, y los 300 monitores con titulación oficial que, de forma voluntaria, integran los 41 grupos de Euskalerriko Eskautak (EE) -federación de grupos scout-, que este año ha escogido la villa ayalesa para celebrar el Gorka Deuna.
Y es que San Jorge, aquel santo que según la leyenda no dudó en enfrentarse a un dragón para defender a una doncella, es su patrón, el ejemplo de lo que cualquier scout debiera ser: una persona valerosa que no se achica ante los peligros. Por ello, cada año organizan una fiesta con motivo de su festividad, que en las últimas ediciones ha pasado por Derio (2015), Langarika (2014), y Marcilla (2013). El lema de este año es Mundu hobea eraikiz: Eskaut como forma de vida. Con él quieren visibilizar que “el escultismo es una manera de vivir y que las personas que somos scout transformamos la sociedad también en nuestro entorno más cercano de familia o amistades, y en nuestro día a día”, explican desde EE.
Esta federación aprovechará su paso por Amurrio para homenajear al ya fallecido sacerdote Félix Murga, “por su ejemplo”, subrayan. No en vano, fue él quien impulsó el movimiento scout en Amurrio, fundando Aisia Eskaut Taldea. Un grupo a quien desde EE también vienen a apoyar, “por tratarse del único grupo de ámbito rural de Álava. Se quiere visibilizar y potenciar el escultismo en la zona”, explican desde la organización. De los 41 grupos que conforman la citada federación, 27 son vizcaínos, nueve son navarros y cinco son alaveses. De estos últimos cuatro se encuentran en Vitoria-Gasteiz: Berribide, Los Ángeles, San Viator y Esperantza.
Otra finalidad de la presente edición del Gorka Deuna (a parte de ser un día festivo y de encuentro de las tres delegaciones que conforman EE -Álava, Navarra y Bizkaia- pasa por “reivindicar que la transformación social es posible y que el escultismo es una herramienta para ello”.
Esta federación lleva desde 1959 trabajando en la educación en el tiempo libre a través de la metodología scout, y educando a través de la experiencia, en base a tres pilares: educación, fe y sociedad. En definitiva se trabaja en la formación de personas libres, críticas y comprometidas, tres cuestiones que quedan patentes en los tres dedos en alto de su saludo especial, mientras que el pulgar se apoya en el meñique, para recordar que el fuerte protege al débil.
Por lo que respecta a la fiesta, la llegada está prevista para las 10.30 horas del domingo. De 11.00 a 13.00 horas habrá diversas actividades por zonas. Así, San Antón se ha reservado para el reencuentro de antiguos scout y madres-padres, con foto finish y world café. Mientras, en la plaza del Ayuntamiento se asentará una especie de mercadillo asociativo, con mercadotecnia de 14 agrupaciones como Fracking Ez Araba, Proyecto Izarra, o Garoña Itxi. Aparte, en el entorno de la iglesia de Santa María se reservará como zona de la naturaleza con recogida de móviles en desuso, recorrido para conocer la flora y fauna de la zona, o talleres para elaborar mochilas-saco, maceteros con sistema de subirrigación, o tecnología libre de conflictos.
De igual forma, en el parque Juan Urrutia habrá taller de txalaparta, herri kirolak, danzas vascas y euskal musika, proyecciones y tienda eskaut, y una txosna. Además, en el área deportiva del Refor se instalará una zona de juegos con paracaídas, ruleta de San Jorge, oca gigante, pista americana, zona hippie, caballos y jinetes del Reino Eskaut, pintacaras, quidditch eskaut, tragabolas humano, armiarma, twister gigante, guerra de pintura y rayuela. Ésta última zona se puede aprovechar para visitar la exposición homenaje a Félix Murga, antes de acudir a la eucaristía de las 13.00 horas y la comida de las 14.00 horas. La fiesta culminará a las 17.45 horas, pero antes actuarán los DJ Xaibor y Top, así como el mago Altrius.
¿Quién fue Félix Murga? Para muchos niños de Amurrio, Félix Murga es sólo el nombre de una de las nuevas calles surgidas en la villa con la urbanización del entorno del parque Juan Urrutia. Y es que se fue de este mundo en 2001 a la edad de 72 años, pero dejando tras de sí una huella imborrable en la memoria de todas las personas que tuvieron el placer de conocerle. De hecho, Félix Murga (1929-2001) fue párroco de San Antón y Larrinbe, además de en Artziniega, Retes de Tudela y Okondo. También fue arqueólogo, paleontólogo aficionado y etnógrafo, especialmente centrado en la comarca alavesa de Aiara y en el burgalés Valle de Mena. Facetas de su vida que le llevaron a promover la Asociación Etnográfica Aztarna, con cuyos miembros realizó innumerables excursiones por los caseríos del entorno, en los que recopilaron las miles de piezas que configuran a día de hoy el museo de cerámica de Amurrio. También se le debe a él la colección de fotografía antigua de este grupo y los tesoros del pasado cercano que configuran la exposición etnográfica sita en el Refor, aunque si por algo se le recuerda con cariño y gran respeto en Amurrio es por el trabajo que realizó con los niños y jóvenes, creando el grupo Aisia Skaut Taldea.
Por ello, en el 35 cumpleaños del grupo organizaron en su memoria un fin de semana al más puro estilo escultista con salidas, juegos, misa, comida, y el descubrimiento de una placa en la fachada de la ermita de San Antón de Armuru en la que, desde aquel 13 de octubre de 2012, se puede leer El mejor homenaje a Félix es seguir trabajando.
Además, Murga -que también tiene desde 2007 en Peñanegra un haya plantada en su honor por los scout, junto a otra placa que reza La vida nos viene de la raíz- participó en numerosas charlas y conferencias, y fue de los primeros en catalogar y estudiar a fondo las loberas o trampas para lobos de las sierras Salvada, Arkamo y Gibijo. Gracias a ello escribió el artículo titulado La caza del lobo en Álava; la lobera de Barrón y Ordenanza de corridas de lobos en Archua (1998), publicado en la revista Kobie.