vitoria - El Ayuntamiento dio a conocer ayer un balance del servicio municipal de Educación de Calle, que el Consistorio presta desde hace veinticinco años a chavales y jóvenes con problemas de adaptación en la sociedad. A fecha 1 de marzo, esta iniciativa socio-educativa atiende a 546 niños y jóvenes, una cifra que varía según va pasando el año, explica la concejala, Nerea Melgosa. Con motivo del 25 aniversario del programa de educación de calle, el Ayuntamiento va a firmar un acuerdo este ejercicio con la UPV y la asociación IRSE, que es quien gestiona el programa, para hacer un estudio de investigación que analice estos 25 años de trayectoria del plan, el efecto que ha tenido el programa en los receptores y plantear mejoras de cara al futuro.
Educación de Calle es un programa de intervención socio-educativa que se realiza en un medio abierto con niños y jóvenes de 8 a 18 años en situación de riesgo de exclusión social. El objetivo de las actividades que se llevan a cabo consiste en incidir en todos los ámbitos en los que se mueven estos chavales, en su entorno más cercano: familia, amigos, escuela, barrio... Precisamente son el contexto familiar, los hábitos de comportamiento, la existencia de una relación conflictiva, el aislamiento, absentismo escolar e inadaptación al colegio factores que contribuyen a que un chaval acabe excluido. Así, mediante diferentes técnica educativas, una veintena de monitores trabaja en parejas con ellos en todos los barrios de Vitoria, primero aproximándose y después motivándoles para finalmente realizar un seguimiento de los avances logrados. El programa Educación de Calle atendió el pasado año a 704 niños y jóvenes, con una media de edad de 14 años, y más hombres que mujeres. Dentro de los planes que se llevan a cabo, algunos están obteniendo varios premios, como el denominado Doce nubes, por lo que los partidos mostraron ayer su satisfacción y pidieron que se siga adelante con la iniciativa. - R. Rz. de G.
