vitoria - A veces, cuando las cosas vienen mal dadas, hay que coger el toro por los cuernos. La capital alavesa ha vivido unos años muy malos desde el punto de vista económico y hay quien, ante la perspectiva del desempleo, decide ser su propio empleador, o eso al menos han pensado las alrededor de 130 personas que cada año y desde hace cuatro se dirigen al Ayuntamiento gasteiztarra para pedir asesoramiento y ayuda económica con el fin de poner en marcha su empresa. Los números lo dicen claro, tras constatar la sociedad que la crisis había venido para quedarse, la incertidumbre espoleó el emprendizaje, como demuestra el hecho de que la media total desde 2003 y hasta el año pasado fue de 53 en cada ejercicio, pero que a partir de 2012 se disparó hasta las 134.
Casi medio centenar de personas (405) se han beneficiado en todos estos años de estas ayudas, que han superado holgadamente el medio millón de euros (527.664) y que se han traducido en la creación de al menos 241 empresas. Por otro lado, el hecho de que desde 2012 se hayan disparado las solicitudes ha supuesto también un incremento de las partidas destinadas a estas subvenciones, que han sido de 40.000 euros por ejercicio, pero que en los últimos cuatro años se han elevado hasta los 100.000 euros de media.
¿Y qué tipo de personas se dirigen al Ayuntamiento con sus proyectos empresariales? Según la estadística de los últimos cinco años, más de la mitad de los perceptores son mayores de 35 años que en la mayoría de los casos intentaban iniciar por primera vez la aventura del emprendizaje. Seis de cada diez tenían estudios universitarios, y sus proyectos giraban en torno a los servicios informáticos (casi el 20% de becas), los servicios técnicos a empresas (19%) y los servicios personales (16%). El dato más relevante, en todo caso, es que dos tercios de los proyectos becados que se constituyen como empresa seguían en funcionamiento al tercer año de inicio de su actividad, según la información del Impuesto de Actividades Económicas.
Ayer la concejala de Empleo y Desarrollo Económico Sostenible, Nerea Melgosa, presentó en el Ayuntamiento el borrador para la nueva convocatoria de estas subvenciones, que concederán ayudas de entre 1.000 y 2.500 euros, y cuya cuantía se decide en función de la calificación obtenida sobre un baremo de 100 puntos. Por ejemplo, contar con formación técnica relacionada con la actividad y en gestión empresarial suma hasta 15 puntos, los mismos que acreditar experiencia profesional relacionada con la actividad y el grado de implicación en el proyecto de la persona promotora, el grado de definición, claridad y calidad del proyecto o su viabilidad técnica y económica. Hasta 10 puntos se pueden obtener en función del nivel de concreción, coherencia y contenidos del plan de trabajo; y por último, el grado de interés en términos de promoción económica, teniendo en cuenta el grado de innovación del proyecto, las actividades económicas emergentes, las industrias creativas, la economía social y la previsión de creación de empleo se valora con un máximo de 30 puntos.
Para acceder a la ayuda mínima de 1.000 euros se deben obtener al menos 65 puntos. Por otro lado, este año la cuantía total de las subvenciones dependerá de la disponibilidad presupuestaria, aunque en principio se han reservado 70.000 euros. La mitad de la ayuda se abonará en el momento de la resolución y el resto cuando se presente la memoria de las actividades realizadas y los resultados obtenidos.
dos convocatorias Quienes deseen montar su propio negocio y quieran acceder a estas ayudas municipales, incompatibles con otro tipo de subvenciones, deberán acudir a las oficinas municipales de San Martín hasta el 15 de junio, si se concurre a la primera convocatoria; o hasta el 30 de septiembre en segunda. Deberán presentar el impreso de solicitud y una declaración jurada, copia del DNI, el proyecto empresarial y un plan de trabajo en el que se detallen las acciones previstas, los objetivos que se persiguen y su calendario.
En el caso de que una entidad con experiencia en el campo del apoyo a las personas emprendedoras se comprometa a tutelar el desarrollo del proyecto, el solicitante deberá presentar un documento en el que se exprese dicho compromiso y programa de las acciones de tutela previstas.
Según Melgosa, con estas ayudas la ciudad tiene “un recurso fundamental para favorecer y estimular el espíritu emprendedor, el autoempleo y la puesta en marcha de nuevas empresas”. La edil vitoriana afirmó que el gobierno municipal “está comprometido con el apoyo al emprendizaje, tanto desde el apoyo económico directo como desde la formación, el asesoramiento o facilitando espacios de los centros de empresas”, y en ese sentido, “las becas para emprender están demostrando ser la mejor herramienta para dar el primer paso hacia la creación de una empresa”.
Las ayudas. El equipo de gobierno presentó ayer el borrador para la convocatoria de 2016, que prevé destinar 70.000 euros para el impulso a la creación de empresas.
La concejala de Empleo y Desarrollo Económico Sostenible destacó ayer el papel de impulso a los nuevos proyectos empresariales que tienen las ayudas institucionales.
134
Solicitudes se presentan de media cada año en Vitoria para acceder a las becas a la creación de empresas. Hasta hace cuatro años, la media era de 53 en cada ejercicio.
