Gasteiz - Se supone que en la ponencia de fiscalidad que se abre hoy en el Ayuntamiento de Vitoria los seis partidos municipales se encerrarán en una sala y tratarán de consensuar un modelo de cobro de impuestos claro, que sea justo y responda a las necesidades de ingresos de la institución. En eso están todos de acuerdo, pero como el arco ideológico en el Consistorio está muy polarizado, la interpretación que hace cada cual de lo que es justo es distinta y se auguran por tanto tensiones.
El concejal de EH Bildu Antxon Belakortu expuso así ayer el estado de las cosas al concejal de Hacienda, Borja Belandia: “Tiene usted dos caminos, son dos mayorías las que puede conseguir, dos formas de entender la gestión, y tiene que elegir”. En lo concreto, Belakortu apuesta por redistribuir la carga impositiva por el IBI y las Plusvalías, ahora que se va a revisar el catastro.
La otra opción de elección en el dilema que le plantea EH Bildu a Belandia es el PP -toda vez que Podemos e Irabazi defienden postulados similares a los de la coalición, y el PSE está alineado con el PNV-. Ayer los populares se mostraban dispuesto a “intentar llegar a un acuerdo sin amenazas”, pues “hay margen” para alcanzar dicho pacto, que a juicio del edil Manu Uriarte también pasa por priorizar “el IBI y las Plusvalías”, los impuestos a los que afecta la revisión catastral. Además, el PP cree imprescindible “conocer los costes de los servicios” que presta el Ayuntamiento antes de definir cómo cobrárselos a la gente. - T.D.