vitoria - Con la llegada del invierno, al menos el oficioso, vuelven las recomendaciones para enfrentarse sin riesgos a la virulencia de la niebla, el hielo, la nieve o la lluvia en la carretera. Son consejos en su mayor parte de pan y melón, y aun así los expertos los repiten todos los años porque no siempre se tienen en cuenta. De hecho, uno de los más importantes es también uno de los menos valorados: la prevención. Hay que tener el vehículo en perfectas condiciones porque ésa es la mejor garantía para evitar accidentes o, en caso de que se produzcan, para que sus ocupantes salgan indemnes.

A partir de ahí, resulta fundamental saber adaptar la conducción a los fenómenos meteorológicos adversos, como recordó ayer mismo Adeada, la Asociación de Empresarios de Automoción de Álava. Si la niebla devora la carretera, como sucede estos días, hay que encender las luces de cruce y el alumbrado antiniebla -nunca las largas porque reflejan-, reducir la velocidad, aumentar la distancia de seguridad, comprobar el funcionamiento correcto de los limpiaparabrisas, no frenar bruscamente ni hacer adelantamientos, tomar como referencia las marcas viales de la derecha de la calzada y procurar circular por el carril derecho en autopistas y autovías. Y en caso de que haya hielo, además de todos los consejos anteriores, también hay que tener presente la dirección y el comportamiento del resto de vehículos y es recomendable conocer la zona por la que se conduce para no tener que usar los frenos.

Con lluvia resulta fundamental encender las luces de cruce para hacerse ver, levantar el pie del acelerador en vez de frenar de golpe para combatir el aquaplaning, evitar que se forme vaho en los cristales y no pisar la pintura blanca de las marcas viales. Si las precipitaciones se transforman en nieve, entonces la conducción ha de ser más suave y, en caso de que el coche derrape, mantener la trayectoria con movimientos suaves del volante. También es bueno circular con la marcha más larga posible, a un nivel bajo de revoluciones, así como llevar el depósito lleno, junto con cadenas o neumáticos de invierno. Y en caso de que granice, además de muchas de las medidas anteriores, jamás hay que parar bajo un puente o un túnel. Ya no sólo porque está prohibido, sino porque eso podría provocar un accidente. - J.S.