Vitoria - La Unión Agroganadera de Álava (UAGA) no quiere participar de momento en la polémica desatada en la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja a cuenta del deseo del sector vitivinícola de Rioja Alavesa de lograr una mayor identificación para sus vinos y sus formas de hacer y trabajar. Sin embargo, reconoce el derecho de los bodegueros a mejorar la identificación de sus vinos.

¿Qué opina sobre la propuesta para mejorar la identificación de los vinos de Rioja Alavesa?

-Desde la UAGA tenemos muy clara nuestra postura desde el principio. Una postura de apoyo a la comarca de Rioja Alavesa y a su vino. Por ello participamos en la propuesta que se presentó ante el Pleno del Consejo Regulador para que junto al nombre de Rioja apareciera el de Rioja Alavesa con el mismo tamaño de tipografía.

¿Apoyan por tanto la identificación?

-Está claro que en Rioja Alavesa se produce unos vinos de manera diferente. No digo que ni mejores ni peores. Sólo diferente. Y que eso debería especificarse en la etiqueta.

Pues la polémica está en la calle?

-Sí, pero nosotros no queremos entrar en ella. No vamos a participar en ninguna guerra, estamos aparte de estas polémicas. Lo que los agricultores queremos es trabajar. Esta historia no es de ahora. Es ya un tema viejo en el tiempo aunque desde hace un año o algo más se está acelerando. Ahora parece que se acaba el mundo, pero todo tiene solución desde el diálogo y el consenso. Flaco favor le haríamos al Rioja si entráramos también los agricultores en esta polémica.

¿Han pulsado la opinión de los agricultores?

-Nunca se debe rechazar una propuesta sin debatirla previamente. Por eso, lo que queremos transmitir desde UAGA es calma y diálogo. Son las bodegas las que están en este debate y muchas de ellas son tan conocidas que tienen resuelto su futuro por el propio prestigio que tienen sus nombres. Sólo oír sus nombres ya es un síntoma de venta segura. Pero nosotros, los agricultores, estamos en otra onda. Ahora mismo sólo pensamos en recoger el fruto de lo hecho durante el año y que esto tenga calidad y buen precio. Luego, cuando acabemos, hablaremos de lo que sea.

¿Lo tienen previsto en agenda?

-Claro que sí, pero antes hay que resolver cuestiones más importantes. Tenemos que hablar de las liberalizaciones de plantaciones y lo tenemos que hacer con el resto de la Denominación de Origen, porque esa medida nos afecta a Álava, a La Rioja y a Navarra. Los tres nos tenemos que poner de acuerdo para ir con una misma postura al Consejo Regulador.

Volviendo al tema, en el Consejo les dicen que planteen sus aspiraciones y demandas, pero los temas de Rioja Alavesa los han retrasado deliberadamente?

-Sí, no entendemos esa invitación a plantear iniciativas cuando hasta hace poco más de un mes hemos estado esperando una respuesta a la petición de que en las etiquetas apareciera el nombre de Rioja Alavesa al mismo tamaño que Rioja, como ocurre por ejemplo en Burdeos.

¿Volverán a negociar?

-Tenemos que hablar todos con todos. Pero ahora mismo la prioridad es seguir vendimiando.

¿Por qué es tan importante la identificación que se busca?

-Por razones económicas, fundamentalmente. Para que cuando un consumidor vaya a un lineal y quiera comprar una botella de vino de Rioja Alavesa le resulte fácil localizarla. Identifica un territorio, pero también una forma de elaborar y los bodegueros están en su derecho de facilitar su localización en los comercios.