navaridas - Los diputados de Desarrollo Económico y Equilibrio Territorial, María Pilar García de Salazar, y de Agricultura, Eduardo Aguinaco, acudieron el domingo por la mañana a Navaridas para conocer en primera persona el estado de la calle Tesoro y adyacente, que están a punto de derrumbarse. En el encuentro estuvieron presentes los cinco miembros de la Corporación municipal, así como otros cargos de la Diputación, como el nuevo director de Equilibrio Territorial, Iñaki Guillerna.

En el transcurso de la visita, el alcalde, Miguel Ángel Fernández, les entregó la documentación que en su día se hizo llegar a la Diputación con una historia de los acontecimientos ocurridos en esta zona del pueblo, donde la humedad a causa de un río subterráneo que desciende desde la Sierra Cantabria está desmoronando los calados y con ello causando daños en las estructuras de los edificios de superficie. Asimismo, se les explicó el estado de cesión al Ayuntamiento para poder ejecutar obras en esas propiedades particulares, que está a falta de escasos temas burocráticos para quedar completado. Debido a que se trata de un tema urgente, ya que cada día que pasa se aprecia más el deterioro en la calle y en otras cercanas, el alcalde se reunió ayer con el nuevo director de Equilibrio Territorial con el fin de aportar los planos, proyectos y fotografías que permitan acelerar una solución definitiva a este problema. Asimismo, en el encuentro se trató del futuro del solar que quedará, que se plantea como una plaza con espacio verde para uso de los vecinos.

Navaridas amenaza con hundirse desde meses y meses atrás. Y, aunque los remedios tenían que haberse puesto antes, porque existe una certificación de que es preciso actuar con urgencia, la realidad es que la institución foral no se ha tomado hasta ahora el problema en serio. La calle Tesoro y otras de sus alrededores se han convertido en lugares de alto riesgo: se abren enormes grietas en los edificios, la calzada se cuartea y la vía se parte de manera trasversal.