vitoria - El martes los termómetros de Vitoria marcarán temperaturas de hasta 38 grados. A las 9.00 horas, cuando arranque el Pleno de investidura de Ramiro González como diputado general, se espera que ronden los 25 grados. Un día perfecto para vestir traje y corbata y ante el que los 51 junteros que se sentarán en el salón foral cruzan ya los dedos para que el sistema de climatización funcione a toda máquina. Al menos, eso sí, el futuro diputado general acudirá con la tranquilidad de saber de antemano que su investidura no peligra, pues para el sábado las votaciones de los siete partidos parecen, salvo sorpresa, bastante claras.
Las posiciones son firmes, y la candidatura presentada a última hora por Irabazi, postulando a su único juntero, José Damián García, como aspirante a diputado general, sólo servirá en realidad para alargar la sesión, pues cada candidato tiene derecho a dar un discurso de hasta una hora de duración y una réplica de media hora. Aunque el miembro de la coalición formada por Ezker Anitza y Equo reclamó el voto a EH Bildu y Podemos “para constituir una alternativa de la mano de un gobierno de izquierdas”, los primeros dejaron claro en su momento que no obstaculizarían la investidura de Ramiro González. Una decisión tomada para allanar el desalojo de Javier Maroto de la Alcaldía de Vitoria y que el PNV se animara a postular a Gorka Urtaran como nuevo primer edil gasteiztarra. De hecho, Álava es la única provincia en la que EH Bildu, no ha presentado candidato, aunque en Gipuzkoa Xabier Olano la retiró en el transcurso del Pleno.
Por su parte, es poco probable, aunque posible, que Podemos, con sus ocho junteros, dé un voto favorable al candidato de Irabazi. Su idea ha sido siempre abstenerse en la votación, aunque el paso de José Damián García les haya pillado, como a la mayoría, por sorpresa. Con todo, será la asamblea que Podemos celebrará el lunes la que refrendará o no la abstención como postura oficial para el martes.
Así las cosas, las posturas de cada uno de los siete partidos con representación en la Cámara foral se pueden atisbar a tres días del Pleno. Los trece junteros del PNV votarán a Ramiro González, como también harán los cinco del PSE. El Partido Popular, que finalmente ha renunciado a presentar a Javier de Andrés como aspirante al no contar con ningún apoyo, anunció ayer oficialmente que sus doce procuradores votarán en blanco. Todo apunta a que EH Bildu hará lo propio, aunque ayer fuentes de la coalición abertzale explicaron que prefieren aguardar al martes para dar a conocer su voto en el momento de la elección.
Podemos también se abstendrá, salvo que la asamblea del lunes les haga virar su postura, y el único juntero de Ciudadanos, Miguel Ángel Carrera, también votará en blanco. José Damián García, de Irabazi, se votará a sí mismo, obviamente. De esta forma, cuando el martes por la tarde se coloque la urna de votación, el resultado más probable en primera vuelta será el que marque 18 votos (PNV y PSE) a favor de Ramiro González, 32 en blanco -salvo que Podemos opte finalmente por apoyar al candidato de Irabazi- y un voto para José Damián García. Un resultado que obligará a celebrar una segunda vuelta, pues para ser nombrado diputado general en primera ronda es obligatorio alcanzar los 26 votos de la mayoría absoluta.
Ya en la segunda votación, sin embargo, el apoyo de los 18 procurados que suman jeltzales y socialistas será suficiente para que Ramiro González sea proclamado como el noveno diputado general de la democracia y pueda empezar a trabajar como tal desde el miércoles.
discursos para regalar El Pleno de investidura será, de todos modos, de los de tomarse con tranquilidad. En la Cámara foral el protocolo manda, y durante la sesión, que se prolongará mañana y tarde con parón para ir a comer incluido, habrá discursos, réplicas y contrarréplicas para dar y regalar, algunos de duración tan generosa que haría las delicias de Fidel Castro y sus eternos circunloquios.
Después de que el presidente de las Juntas, Pedro Elosegi, dé el pistoletazo de salida a la sesión a las 9.00 horas, tanto Ramiro González como José Damián García dispondrán de una hora cada uno -no es necesario usarla entera- para dar su primer discurso postulándose como candidatos.
Posteriormente, cada uno de los siete portavoces tendrán media hora para decir lo que gusten ante el micrófono. Finalizado este paso, la sesión se suspenderá hasta la tarde para ir a comer. A la vuelta, los dos aspirantes a diputado general podrán ejercer su derecho a réplica durante media hora cada uno, y luego los siete portavoces tendrán opción de contrarréplica durante diez minutos por cabeza. Finalizadas las intervenciones, el presidente suspenderá la sesión cinco minutos antes de que, por fin, se inicie la votación.