- A finales de enero, cuatro asociaciones de vecinos (Zazpigarren Alaba, Gasteiz Txiki, Errota Zaharra y Errekatxiki-Santa Lucía), además de la plataforma social Elkartzen pidieron al Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) que auditase la actuación de la sociedad municipal Ensanche 21 durante los últimos quince años. Los denunciantes censuran en su escrito el “funcionamiento opaco” de una entidad que creó el Ayuntamiento para “esconder sus actuaciones en materia inmobiliaria”, ya que las reuniones son a puerta cerrada. Ante la tibia respuesta del máximo órgano fiscalizador de Euskadi, Elkartzen vuelve de nuevo a la carga: emplaza al Ayuntamiento a que cierre definitivamente Ensanche 21 y a que liquide los planes urbanísticos que tiene para Errekaleor y Olarizu a la mayor brevedad posible, dejando estas zonas fuera de ordenación hasta que se apruebe el nuevo PGOU de la ciudad, Plan General que, por cierto, debía haberse redactado esta legislatura y no se ha hecho nada. Los denunciantes sospechan del modo de hacer de Ensanche 21, por ejemplo, en el caso de las ofertas de parcelas de Aretxabaleta para que se instalen grandes superficies. Acusan a Ensanche 21 de tratar de equilibrar su balanza de ingresos y gastos con la venta de suelo a las grandes superficies, desprendiéndose de la mayoría de las parcelas que posee -dicen-, desregulando de este modo el mercado inmobiliario y siguiendo con su política especuladora con el beneplácito del Ayuntamiento. Para Elkartzen, esta forma de operar demuestra que el Ayuntamiento “es el primero en especular, en saltarse los plazos y en animar a las empresas a que hagan lo mismo”. Por eso también emplazan otra vez a los partidos de la oposición a que “paren esta huida hacia delante de Ensanche 21”, que cierren la sociedad y exijan una auditoría sobre sus actuaciones de los últimos años.
Hace tiempo que Ensanche 21 está en el punto de mira. De hecho, el acuerdo al que PP y PNV llegaron es que la sociedad urbanística se disolvería, poco a poco y de forma ordenada, como plantearon los nacionalistas, y que sus asuntos pasarían a manos del departamento de Urbanismo. A día de hoy continúa en activo porque, entre sus funciones tiene por ejemplo la puesta en marcha de la nueva estación de autobuses que no comenzará a funcionar hasta el 16 de marzo. En su solicitud, las asociaciones aportaron un listado de las actuaciones a investigar, que abarcan las dos legislaturas de Alonso y los cuatro años de Lazcoz y Maroto en la Alcaldía. - R. Rz. de Gauna