el anecdotario de estas últimas horas en el territorio histórico incluye epígrafes para todos los gustos. Por ejemplo, el capítulo más jugoso de la jornada se centra en tres jóvenes de Oion, que pasaron la noche del miércoles al jueves en el interior de su coche, en un punto de la carretera entre Kripan y Meano. Al parecer, esperaban que alguien pasara para ayudarles. Finalmente, ayer al mediodía, fueron rescatados y trasladados a Kripan. Según explicó el presidente de la Cuadrilla de Rioja Alavesa, Jokin Villanueva, estos tres muchachos se vieron en dificultades por el estado de la carretera. No obstante, lejos de llamar a los servicios de emergencia decidieron esperar para que les ayudara el primer vehículo que pasara. Lo cierto es que dado el mal estado del tiempo a nadie se le ocurrió pasar por allí y ellos tampoco debían estar preocupados, por lo que pasaron la noche en el interior del coche hasta que, al parecer aburridos, decidieron llamar a los servicios de auxilio, que inmediatamente organizaron el rescate de estos oioneses. Eso si, parece ser que un amigo de ellos de Kripan, al ver que no volvían, intentó llegar hasta ellos, pero sin lograrlo, y sin avisar a emergencias.
Por lo demás, en Rioja Alavesa los principales problemas se registraron a causa de las heladas y las precauciones tomadas para evitar accidentes. Así, hubo varios colegios que cerraron sus puertas para evitar peligrosos desplazamientos, como fue el caso de Villabuena de Álava.
En Montaña Alavesa el episodio de nieve es uno de los más importantes que recuerdan en la zona. La principal consecuencia es que los escolares se han encontrado con unas vacaciones inesperadas hasta el próximo lunes, en principio, ya que resulta peligroso el desplazamiento por carretera.
También se tuvieron que adaptar a la situación algunos establecimientos, como el Restaurante Izki, en Maeztu, habitual programador de actividades de ocio los fines de semana. La fiesta concierto prevista con el dúo Lobo y Carmine se ha tenido que suspender hasta que amaine el temporal. Por su parte, en Bernedo, el hielo ocasionó que un camión de la Diputación Foral de Álava se cayera en una cuneta. En Alda y otros núcleos próximos, los vecinos se quedaron aislados a causa de la gran cantidad de hielo.
En la comarca de Añana las prioridades básicas están en el mantenimiento de los accesos a la residencia de Caicedo-Sopeña, en Ribera Alta, y en estar pendientes de los horarios escolares. Respecto a otros sucesos, destaca un único corte de electricidad en Zambrana el miércoles por la tarde, que se subsanó enseguida.
En la Llanada, por regla general, los pueblos han limpiado suficientemente la nieve por su cuenta. Es de reseñar que los apagones, habituales en otros episodios de temporal, por ahora no han tenido incidencia. Lo único reseñable se ha dado en el albergue de Barria, donde un grupo de estudiantes se quedaron ayer sin transporte para regresar a sus hogares.
En Ayala, tras un miércoles con muchísimos problemas, la tranquilidad, aunque relativa, se impuso ayer. Relativa normalidad. Tras la intensa nevada, el mercurio no bajó de la forma tan brusca que se vaticinaba. En Ayala, la ikastola Etxaurren retomó su actividad tras un día de clases suspendidas. En Okondo se aprovechó para abrir caminos de acceso a zonas de caseríos en los que el día anterior era casi imposible llegar. Con todo, los puertos de Altube y Orduña permanecieron cerrados, por la Barrerilla sólo se permitía circular con cadenas, y aunque el Alto de las Chozas y Garate permanecieron abiertos, hubo que conducir con precaución por la persistente amenaza de nieve y hielo.
“Las temperaturas no han sido tan bajas como se esperaba y la encomiable labor de los retenes voluntarios de limpieza viaria han hecho que haya una ausencia total de incidentes de importancia, salvo un pequeño susto que nos ha dado un autobús que se ha quedado trabado en el Alto López”, explicaba a este diario Mikel Lasa, presidente de la Cuadrilla de Ayala, que también quiso hacer extensivo su agradecimiento a la Junta Administrativa de Luiaondo que “ha colaborado con un camión” y a “todos los trabajadores municipales de los cinco ayuntamientos ayaleses”, manifestó.
En cualquier caso, Llodio ha activado su plan de emergencias municipal y, al igual que Artziniega, ha emitido un bando en el que dan a la población consejos, tanto para la circulación rodada como peatonal, mientras dure el temporal. Algunas de estas recomendaciones pasan por evitar salidas innecesarias, circular despacio y atentos a la presencia de placas de hielo, mantener una distancia de seguridad con el coche anterior superior a la habitual, evitar el uso del freno y los movimientos bruscos de volante, o no subir a los colegios en coche
El Ayuntamiento de Amurrio, por su parte, ha puesto en marcha un dispositivo especial para hacer frente a las incidencias derivadas de la climatología adversa.
Sin noticias. Al cierre de esta edición no había que reseñar ningún accidente de consecuencias dramáticas. Los vecinos de las cuadrillas sobrellevan con normalidad los rigores del invierno y están acostumbrados a trabajar para mantener toda la normalidad que es posible en estos casos. Como hecho reseñable, el de los tres jóvenes de Oion que pasaron la noche en su vehículo en el alto de Meano hasta que fueron rescatados.