llodio - La segunda localidad alavesa ya tiene todo preparado para afrontar hoy sábado su tradicional feria de San Blas que, un año más, ha organizado la asociación local Kukutxe en el recinto ferial de la plaza Aldai. Se trata de una fiesta que acerca a la población las costumbres típicas del caserío vasco y, como tal, cumplirá con su tradicional guión que tuvo su pistoletazo de salida el jueves con la presentación de Terencio VIII, el txarri protagonista de la jornada, en el mercado de la Herriko Plaza.
Durante unas horas, el público pudo ver vivo al hermoso ejemplar porcino -criado en el caserío Ostenko por la familia Orueta-Respaldiza, a base de remolacha, calabaza, harina de maíz y cebada molida- que será sacrificado a primera hora de mañana y trasladado a mediodía desde el antiguo asilo hasta el recinto ferial, sobre un carro tirado por burro, y acompañado en kalejira por un grupo de zanpantzarrak.
Una vez en la plaza Aldai, tendrá lugar la txarriboda: una demostración pública del tradicional proceso de matanza del cerdo, que se inicia con el quemado y raspado de la piel y culmina con la limpieza de sus vísceras, para terminar colgado en el recinto, de cara a que el público pueda tomar parte en la pesoquiniela. Un juego de gran aceptación que consiste en adivinar el peso del animal en canal (el récord lo marcó, en 2006, Terencio III que alcanzó los 448 kilogramos) y que tendrá lugar media hora antes de la rifa que marcará el fin de fiesta a las 20.30 horas.
Y es que el txarri volverá a ser el principal atractivo de una jornada en la que además se rendirá de nuevo un merecido homenaje a una pareja de vecinos que han dedicado toda su vida al duro trabajo en el baserri: Lorenza Andikoetxea y Antonio Atxa, del caserío Kasille. Este acto estará precedido por la actuación del coro Los Arlotes. La feria continuará por la tarde, a partir de las 18.00 horas, con una degustación de castañas, danzas vascas y romería, el pesaje del cerdo y una rifa.