amurrio - El Ayuntamiento de Amurrio lleva ya tres años sin poder atender todas las solicitudes de parcelas hortícolas que ponen a disposición de la población en régimen de arrendamiento desde la década de los 60 del siglo pasado por estar ocupadas las 200 parcelas que tiene destinadas a este cometido. Y es que en los últimos años, debido a la situación de crisis social y económica, la demanda de huertas por parte de la población se ha incrementado hasta el punto de que las solicitudes superan en número a los huertos disponibles. Una realidad que tiene visos de continuar el año próximo, a tenor de las cifras dadas a conocer esta semana desde EH Bildu, el grupo mayoritario de la oposición en este Ayuntamiento, que han puesto sobre la mesa que hay alrededor de veinte personas que han solicitado un alquiler y han recibido una negativa por respuesta. En este sentido, la coalición abertzale propone al resto de compañeros de Corporación que se aumente la dotación de huertas municipales hasta satisfacer la demanda de todas las personas que lo soliciten y cumplan los requisitos exigidos. No en vano, el concejal Juanjo Yarritu considera que hay posibilidad de instalar más huertas que den respuesta a la demanda. Para ello, plantea instalar más huertos en terrenos municipales que, aunque tengan otro destino, actualmente no se están usando, como por ejemplo, en los polígonos industriales o, si es necesario, en terrenos alquilados al efecto.

En concreto, el Ayuntamiento es propietario de 199 huertas municipales, repartidas a razón de 63 en la zona del cementerio de Larrabe, 53 en Basatxi, 65 en San Roque y el resto fuera de zona, dispersas. A través de un alquiler simbólico están a disposición de los vecinos . Yarritu subraya que estas huertas cumplen un doble objetivo, ya que “son una posibilidad de ocio saludable para muchas personas, pero a la vez proporcionan a las personas usuarias alimentos sanos y de calidad a un precio muy razonable”.

Para adjudicar los huertos, cada mes de diciembre se efectúa un inventario de altas y bajas, y la consiguiente inspección anual que, sobre el uso correcto de los mismos para evitar su degeneración, realiza el personal municipal. Las primeras huertas municipales en Amurrio se remontan a los años 60, cuando los primeros inmigrantes solicitaban algún terreno para ayudar en la economía familiar. Sin embargo, fue con la crisis del metal cuando se aumentaron las zonas destinadas a cultivar. - A.O.