gasteiz - La asociación de vecinos Zabalgana Batuz mostró ayer su satisfacción con la reordenación de la red de autobuses urbanos de Vitoria que permitirá al barrio gasteiztarra contar con una nueva línea desde finales de otoño, pero reclamó a la sociedad pública que busque fórmulas para reducir el número de trasbordos, como se está haciendo en Barcelona, el espejo en el que se mira la capital alavesa. Además, el colectivo vecinal manifiesta que la futura línea 10 carece de una conexión con la 2, la Circular, lo que supone un perjuicio para muchos estudiantes, tal y como han trasladado multitud de familias del barrio a la asociación.

Todas estas cuestiones se recogen en un escrito que los vecinos entregaron a los responsables municipales en el consejo territorial del pasado jueves y en el que se pide además que se involucre a las asociaciones de los barrios en un proceso más participativo. “Hemos manifestado en la reunión que el derecho a proponer, reunirnos, conocer información o a formular preguntas a decisiones tomadas no es un proceso participativo real”, señaló la asociación en un comunicado.

En todo caso, según explicó ayer a DNA Javier López de Robles, de Zabalgana Batuz, ahora se cita a los colectivos vecinales, un cambio sustancial fruto de los cambios producidos en el último año en la gerencia de la empresa.

López de Robles explicó que la implantación de la L-10 supone “un cambio trascendental” que la asociación venía reclamando desde hace años, y que en principio debe acabar con la saturación de la L-6. Destaca además el hecho de que la eliminación de la lanzadera de Aldaia evite pagar el doble a sus usuarios con respecto al resto de ciudadanos.

Sin embargo, los vecinos creen que al recorrido presentado el jueves se le pueden y deben hacer algunos ajustes. Muchos jóvenes del barrio pierden con la implantación de la nueva línea la conexión con la L-2 que les comunica con los institutos de la ciudad, y por ello la asociación sugiere que se establezca una parada cerca de esta segunda línea para evitar largos desplazamientos a pie de un autobús a otro o que, en el peor de los casos, los estudiantes opten por utilizar la L-6 para mantener esa conectividad.

Según López de Robles, gran parte de los usuarios actuales del autobús urbano en el barrio de Zabalgana se bajan a mitad de recorrido, especialmente a primera hora de la mañana, para hacer el trasbordo y dirigirse a sus centros de estudios. Esta situación se debe, por otro lado, a otro de los problemas crónicos del barrio, la falta de una oferta educativa acorde con su densidad de población y edad media.

revisiones anuales Por otro lado, los residentes del barrio más poblado de la ciudad reclaman al Ayuntamiento que la red de transporte colectivo se revise cada año, al margen del importante rediseño que se está acometiendo este otoño. Hay que tener en cuenta que el estudio sociológico del que parte el Plan de Movilidad sacó una fotografía de hace más de diez años. En este tiempo, Zabalgana ha pasado de no existir a conformar el hogar de 20.000 vitorianos.

La asociación vecinal recuerda además que el Plan de Movilidad vitoriano, diseñado por el experto catalán Salvador Rueda, se basa en el de Barcelona, donde está prevista una próxima revisión, rechazada aquí por el Consistorio. En la capital mediterránea se ha emprendido un proceso que persigue disminuir entre un 8% y un 10% el número de trasbordos en la ciudad. “Queremos que se potencie la calidad del transporte sobre la cantidad”, señaló López de Robles en ese sentido.

Ya la actual redefinición de la red de Tuvisa, diseñada a partir de las aportaciones de las asociaciones vecinales, los propios chóferes de la empresa y la gerencia, persigue ese objetivo de ir evitando unos traslados de un autobús a otro que ralentizan de forma notable los desplazamientos por la ciudad.

coches bajo pedro asúa La línea 10, para cuya consecución se ha llevado a cabo la reforma integral de la red de transporte, entrará en funcionamiento a finales de otoño, según señaló el pasado miércoles la gerente de Tuvisa, María José Ajuriaguerra, en una entrevista este diario. En la actualidad se están desarrollando diversas obras a lo largo del itinerario para adaptar las calles al paso de los autobuses, la más importante la creación de un carril bajo el viaducto de la calle Pedro Asúa.

Esa obra contempla un carril bus y otro de vehículos privados hacia el centro de la ciudad, pero en el otro sentido sólo el urbano va a poder transitar por allí, según afirman los responsables de Zabalgana Batuz a la vista de cómo se están desarrollando los trabajos. La asociación pide que se pueda transitar en ambos sentidos y rechazan la posibilidad de que esta medida pueda generar en las calles Pintor Teodoro Dublang y San Valentín de Berriotoxa, que se unen bajo el viaducto, un corredor con importantes flujos de tráfico. “No tiene sentido reservarlo sólo para autobuses”, explicó López de Robles, quien señaló que el Departamento de Tráfico se comprometió a estudiar la medida y que la misma evitaría los rodeos y consiguientes atascos en la rotonda que separa las calles Pedro Asúa y Adriano VI.

de san martín a salburua La nueva línea pasará por debajo del viaducto proveniente de la Avenida de las Naciones Unidas (donde hará el mismo recorrido que la actual lanzadera de Aldaia), la Avenida del Mediterráneo y la calle Teresa de Calcuta, y por Teodoro Dublang llegará al centro de salud de San Martín y a las nuevas oficinas municipales vitorianas, ubicadas en este barrio y que se estrenarán a principios de 2015. El autobús seguirá recorrido hacia Larrein, al otro extremo de la ciudad, a través del Ensanche y de Adurza.

Tuvisa baraja, por otro lado, suprimir la línea del Casco Viejo, cuyo uso es mínimo, y que nació para mejorar la accesibilidad al centro de salud de la calle Correría, hasta donde ahora llegan las escaleras mecánicas.

Enlace con la L-2. Zabalgana Batuz pide que la nueva línea 10 cuente con una parada próxima a la L-2, la Circular, para dar respuesta a los estudiantes del barrio que viajan a diario a los institutos del sur de la capital alavesa.

Menos trasbordos. La asociación reclama además un estudio para reducir los trasbordos en la red de Tuvisa.

Vehículos bajo Pedro Asúa. Los vecinos piden poder circular, como hará el autobús, bajo el viaducto de Pedro Asúa.