vitoria - Las reacciones a las exigencias del PP para endurecer el acceso a la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) no se han hecho esperar. El consejero de Políticas Sociales, Juan María Aburto, ya salió el martes al paso para declarar que la propuesta de Maroto es una cortina de humo para recortar derechos y acabar con el sistema vigente en Euskadi desde hace décadas, más que una medida para perseguir el fraude social del que el alcalde de Gasteiz aún no ha dado datos. SOS Racismo y el PSE de Vitoria se posicionarán hoy.

Sobre una de las medidas más polémicas planteadas por el PP, la de dejar fuera de la RGI a los sin papeles, Aburto explica que todo extranjero en situación irregular que cumple los tres años de empadronamiento, cumple simultáneamente el requisito de tres años de residencia en España, que permite el acceso al arraigo. Y está en situación de poder solicitar su regularización por la vía del arraigo social, si consigue firmar un contrato de trabajo. “Significa que no hay tales rentas vitalicias para los irregulares”, niega a Maroto y le pide más rigor. - DNA