gasteiz - Una de las calles más emblemáticas de la capital alavesa se transformó ayer para convertirse en el salón de baile más amplio y con mejores vistas de los que se tiene constancia. En él, alrededor de 500 dantzaris de entre 3 y 14 años demostraron sus mejores pasos, cabriolas y piruetas en una jornada especial en el calendario de las dantzas en el territorio histórico. No en vano, la plaza de la Virgen Blanca se convirtió en el epicentro de la vigésimo sexta edición del Certamen Interescolar de Danzas de Álava, todo un evento para comprobar el estado de la cantera que se forma en una de las partes fundamentales de las culturas provincial y euskaldun.
Llegados de toda Euskadi, la jornada comenzó a partir de las 17.30 horas. Fue entonces cuando los más hábiles y los más voluntariosos dieron inicio a un repertorio con todos los bailes de la tradición. Organizado por Araba Dantzarien Biltzarra y con el patrocinio del Ayuntamiento de Vitoria y la colaboración de la Caja Vital Kutxa, la cita volvió a reunir a los niños de un buen número de ikastolas y grupos de danza para llenar de color las calles de Vitoria. - DNA